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DATOS Y SOLIDARIDAD EN RESPALDO DE GELMAN
La indiscreción del embarazo

Los organismos de derechos humanos de Uruguay dijeron que el nieto del poeta habría nacido en el Hospital Militar.

Mónica Soliño, Sara Méndez, Ariel Soto, Enrique Rodríguez Larreta, Milka Rodríguez y Alberto Hein.
Denunciaron que la nuera de Juan Gelman podría ser la embarazada argentina que dio a luz en cautiverio.

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t.gif (862 bytes)  El oficial de guardia repetía las indicaciones que le daba el médico por teléfono. Los detenidos estaban cerca. Supieron así que en el piso superior había niños y una mujer embarazada. Estaban en el Servicio de Información de Defensa, ubicado en Boulevard Artigas y Palmar, en Montevideo. Habían sido trasladados desde el centro clandestino Automotores Orletti, en Buenos Aires. Cuando llegó el momento del parto, el doctor ordenó que la joven fuera internada en el Hospital Militar. Y que el vehículo entrara por el fondo del lugar. Poco después un carcelero le preguntó a otra detenida cómo se preparaba una mamadera para un recién nacido. La mujer embarazada podría ser la nuera del poeta Juan Gelman y el bebé su nieto o nieta. Sobrevivientes de Orletti recordaron estos hechos, que habían sido revelados en 1985, en la conferencia de prensa que brindaron ayer en Montevideo.
“Gelman, con nuestra colaboración, juntó una serie de elementos que permiten tener casi la seguridad de que su nuera, María Claudia García Irureta Goyena, dio a luz en cautiverio en Montevideo”, aseguró Sara Méndez, en la conferencia. Méndez fue secuestrada en Argentina junto a su hijo y luego trasladada a Uruguay. Su hijo aún permanece apropiado, casi con seguridad, por la familia política del teniente coronel uruguayo Juan Rodríguez Buratti. El 10 de octubre pasado, Gelman escribió una carta abierta dirigida a Sanguinetti en la que le pide respuesta sobre el paradero de su nuera y su nieto/a. Ese reclamo generó una cadena de solidaridad de intelectuales del mundo y desencadenó la respuesta del presidente uruguayo, en la que promete seguir ocupándose del tema aunque no aporta ninguna información.
El relato de los ex detenidos fue confirmado por el soldado Juan Carlos Barboza, quien en agosto de 1985 manifestó ante legisladores uruguayos que vio “dos niños y una mujer embarazada” en la cárcel clandestina de la Secretaría de Información de Defensa (SID). Barboza describió a la mujer como “una joven de aproximadamente 25 años, de pelo castaño oscuro, de tez blanca y lozana”, datos que coincidirían con los de la nuera de Gelman.
Los dirigentes de derechos humanos orientales recalcaron que esta información fue brindada por los sobrevivientes del Plan Cóndor en 1985. Y que en ese mismo año el soldado Barboza la confirmó. Esto contrasta con los dichos del presidente uruguayo, Julio María Sanguinetti, quien afirmó que “en principio” la nuera de Gelman no fue llevada a Uruguay.
El poeta sólo supo hace poco que María Claudia podría ser la mujer que estuvo detenida junto a los niños Anatole y Victoria Julien Grinsonas –de 4 años y 18 meses de edad– en Orletti y en la SID de Montevideo. Pero la Justicia uruguaya y el Parlamento, a través de una comisión investigadora, sabían que en el edificio de la SID estuvo detenida una mujer embarazada que dio a luz en el Hospital Militar.
Los dirigentes de derechos humanos presentaron ayer los extractos de actas parlamentarias en las que constan las declaraciones del soldado Juan Barboza del 14 de agosto de 1985. El militar aseguró que “luego del mes de octubre la mujer dio a luz un niño”, cuyo sexo no pudo determinar, “y una noche el teniente coronel (Juan Antonio) Rodríguez Buratti y el capitán (José) Arad trasladaron a ambos con un destino que desconozco”.
Los miembros de Madres y Familiares de desaparecidos y los sobrevivientes de Orletti luego trasladados a Montevideo (Sara Méndez, Enrique Rodríguez Larreta, Ariel Soto y Mónica Soliño) que hablaron durante la conferencia de prensa destacaron que si Sanguinetti no dio respuesta alguna al reclamo del poeta se debe a la falta de voluntad política, que quedó plasmada en la ley de caducidad dictada durante el primer gobierno de Sanguinetti (1985-90). Esa ley puso fin, antes de su inicio formal, a los juicios contra militares y policías implicados en violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.
Los testimonios, datos, nombres y otros elementos que permitieron a Gelman reconstruir la peripecia de su nuera “fueron puestos en conocimiento de los poderes uruguayos hace quince años, pero el presidenteSanguinetti, que dispone de todos los medios, poderes y autoridad, concluye que no pudo averiguar nada”, destacó Méndez.

 


 

BUSSI, LEJOS DE LA BANCA
El PJ también lo veta

t.gif (862 bytes) Un grupo de 15 diputados justicialistas presentó un proyecto de resolución en el que propone rechazar la incorporación a la Cámara baja del represor Antonio Domingo Bussi, por considerar que “moralmente está inhabilitado” para ocupar cargos públicos. La iniciativa, presentada por la diputada Marta Ortega de Aráoz y acompañada, entre otros, por Mario Das Neves y Saúl Ubaldini, recomienda rechazar el pliego de Bussi porque “se encuentra imputado por delitos imprescriptibles contra la humanidad”.
En sus fundamentos, la iniciativa advierte que Bussi “ha interrumpido la observancia de la Constitución por actos de fuerza pública contra el orden institucional y el sistema democrático” y recuerda que “el sujeto en cuestión (Bussi) ha quedado abarcado por la ley de punto final; la nueva Constitución Nacional debe interpretarse como exigente de un nuevo requisito a los fines de poder revestir el título que se cuestiona: ése es el no haber cometido tales delitos”.

 

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