Por Adrián De Benedictis
El día tan esperado para River ha llegado. Cuando el sol comience su despedida, la ansiedad acumulada durante los últimos días podrá transformarse en un grito de desahogo por otro objetivo cumplido. Para ello, el conjunto conducido por Ramón Díaz buscará el punto que le permita festejar el título número 28 en la historia del club. Y uno de los que pretende finalizar el año con una gran sonrisa es el colombiano Mario Alberto Yepes. A los 23 años, el defensor que llegó desde el Deportivo Cali, en julio pasado, está cerca de quedar en los anales de la institución. “Es muy lindo tener esta posibilidad. La verdad, si bien sabía que River estaba acostumbrado a pelear todos los campeonatos, no me imaginé que tan rápido podía ganar algo importante”, remarca este morocho de gran contextura física. La cima para él y para River está próxima, y en la cancha de San Lorenzo intentarán llegar bien alto.
–A pesar de la diferencia de tres puntos, ¿no te animás a decir que ya son campeones?
–Seguramente lo diré después de jugar con San Lorenzo, sólo por una cuestión de tiempo. Ahora tenemos tres puntos de ventaja y debemos sacar rédito de eso. Lo más importante será seguir con el mismo objetivo y concentrarnos en el partido. No sería respetuoso decir que ya somos campeones.
–¿Pero no creés que así le das una ilusión a Boca y Central?
–No me interesa ninguno de los dos. Que Boca se ilusione, es su problema. Dependemos de nosotros y no tenemos que pensar en nadie más.
–Con las ausencias que tendrá San Lorenzo, ¿ustedes arrancan el partido con una pequeña ventaja?
–No creo, porque los que entran querrán demostrar que también pueden jugar. Siempre fuimos muy respetuosos de todos los rivales y lo vamos a seguir siendo hasta el final. Tenemos que tener la tranquilidad suficiente para saber que un partido no se gana con el hecho de salir a la cancha.
–Cuando comenzó el torneo y no podían llegar a la punta, ¿se imaginaron que llegarían a la última fecha con esta chance?
–Siempre confiamos en nuestro trabajo y en lo que veníamos haciendo. A medida que pasaban los partidos nos fuimos dando cuenta que podíamos estar arriba. Creo que el triunfo ante Boca fue muy importante en el aspecto anímico, y a partir de ahí nuestro rendimiento fue en aumento. Apenas empatamos un partido (con Chacarita).
–¿Por qué a lo largo del campeonato se dijo que River era favorecido por los arbitrajes o por algunas decisiones de AFA?
–Pueden decir lo que quieran. Yo nunca pensé que a River lo favorecieron. Estamos donde estamos por méritos propios y nadie nos regaló nada.
–Justamente, Boca cuestionó mucho tu inclusión en el superclásico, porque River no te quiso ceder a la Selección por una supuesta lesión.
–Sí, pero la verdad se supo después, y quedó demostrado que River no actuó de mala fe. Acá nadie nos favoreció; no sé si Boca quiso sacar ventaja con todo eso, pero en la cancha nosotros hicimos la diferencia.
–¿Si estuvieras en Boca, tendrías confianza en ganar el título?
–A mí me molestaría estar debajo como está Boca.

Por Ariel Greco
Todo San Lorenzo soñó el partido ante River como una gran final en la que se decidiera el título. Pero como los resultados no fueron los esperados, jugadores e hinchas sólo se pueden conformar con amargarle el festejo a River. Luego de su pasado en el equipo de Ramón Díaz, Carlos Javier Netto tiene una oportunidad de demostrarle a quienes no confiaron en sus condiciones que la decisión de no comprarle el pase fue equivocada. Sin embargo, el volante de San Lorenzo asegura que no tomará el partido como una revancha, y que el equipo buscará el triunfo “para darle una alegría a la gente”, más allá de quién se vea favorecido con esa hipotética victoria.
–¿Sienten que son los jueces del campeonato?
–Nosotros no lo tomamos de esa manera. Lo único que queremos es ganar, porque es un clásico. Tiene un condimento extra, ya que se puede definir el campeonato, pero somos conscientes de que San Lorenzo tiene que terminar el torneo de la mejor manera, y estos tres puntos son importantes para terminar bien arriba. Sería la manera ideal de cerrar el año.
–¿Le pueden arruinar la fiesta?
–Vamos a salir a ganar, eso es lo único que puedo decir. Después habrá que ver cómo se presenta el partido. Lo que nos interesa es la imagen que deja San Lorenzo. Hay que terminar bien un año muy positivo, porque si bien no se logró ningún título, se peleó hasta las últimas consecuencias.
–¿Pero le pueden ganar a River?
–Si no pensara en que le podemos ganar, me quedaría en mi casa. Cuando uno sale a la cancha lo único que piensa es en ganar. Además es un partido muy lindo para mostrarse porque va a ir mucha gente.
–¿Es especial que el rival sea precisamente River?
–No, para nada. No es un partido más porque se trata de un clásico con mucha historia, pero eso no tiene nada que ver con que yo me haya ido de River. No tengo ánimo de revancha. De mi paso por River tengo un buen recuerdo, y creo que demostré poder jugar ahí. Ahora no pienso en buscar destacarme en este partido para demostrar algo.
–Si ganan van a decir que estaban incentivados y si pierden van a decir que no pusieron todo. ¿Cómo influye todo lo que se habló en la semana?
–En nada. En la cancha somos once contra once...
–No podés negar que el clima es diferente al de cualquier partido...
–Sí, pero eso lo habla el periodismo. A nosotros lo único que nos interesa es jugar. No pensamos en lo que dicen, en si nos van a dar plata o si nos van a incentivar. Hay que dejar todo por la camiseta que tenemos que defender, lo demás es verso.
–Pero Basualdo dijo que no pone las manos en el fuego por los jugadores de San Lorenzo.
–Son problemas de Basualdo, a mí no me interesa y no sé por qué lo habrá dicho. Aunque me molesta bastante que se hable más de estos temas que de la definición en sí. Hay tres equipos que pueden ser campeones pero de lo único que se habla es si a aquél le dieron plata o no.
–¿Cómo se le gana a este River?
–Hay que estar concentrado los noventa minutos porque ante el mínimo descuido ellos tienen jugadores importantes que te pueden desequilibrar. Claro que nosotros también tenemos muchas virtudes y los podemos complicar.