Principal RADAR NO Turismo Libros Futuro CASH Sátira


ENTREVISTA EXCLUSIVA AL REALIZADOR ITALIANO VITTORIO TAVIANI
"La vida es bella porque cambia"

El veterano director habla de su relación con su hermano Paolo, del neorrealismo italiano, y de "Tu Ridi", su último film, de próximo estreno en la Argentina. Pero no quiere hablar de proyectos, "porque trae mala suerte".


Por Judith Brandwaiman
t.gif (862 bytes) Con su hermano Paolo, han logrado a través de una larguísima trayectoria un cine tan armónico y monolítico que resulta increíble que sea obra de dos creadores. Sin embargo, es así. Películas como Padre Padrone, Kaos y La noche de San Lorenzo dan testimonio de ello. A pocos días del estreno de Tu ridi (la fecha tentativa es el 15 de junio) en la Argentina, Vittorio Taviani, en un clima de gran calidez, habló de la película, del sentido que le otorgan ambos hermanos al cine, de sus temáticas recurrentes, de la importancia de continuar filmando y, entre otras cosas, de cómo hacen para trabajar juntos.

  --¿Cómo surge la necesidad de volver sobre Pirandello y pensar un film en episodios, aunque de un modo diferente del que hicieron en Kaos?

  --Tu Ridi, nuestro último film, no nació de una relación directa con Pirandello, sino sobre el hecho verídico que se ve en el capítulo de la película Dos secuestros, y tiene que ver con el secuestro de un niño, porque en el momento en que ocurrió, sentimos una gran angustia. Descubrimos que la violencia del mundo se ha volcado sobre los inocentes. Entonces, recordamos que Pirandello tenía un relato sobre un secuestro que ocurría en la montaña, y nos dijimos: volvamos a leerlo. Cuando lo hicimos, encontramos puntos de convergencia con el secuestro de hoy y pensamos que, al conectarlos y a su vez confrontarlos, uno echaría luz sobre el otro. Uno pertenece al mundo de la crónica y el otro al literario, y al poner uno al lado del otro puede verse cómo se transformó la violencia en el espacio de un siglo. Cuando notamos que en nuestra película surgía el tema de la violencia, nos acordamos de otro personaje de Pirandello, y así surgió la otra historia del film y es así que en el episodio de "Felice" convergen cuatro o cinco relatos diferentes de Pirandello. No se elige a los autores por el período al que pertenecen, sino por la convicción de que aportan algo a través de su página de modo tal que, por medio de su ayuda, uno pueda crear su propio mundo.

  --En el primer episodio el personaje no soporta su cuerpo al ser consciente de su traición. ¿Qué ocurre con este tema en el film?

  --El episodio de "Felice" transcurre en la época del fascismo, en un período sumamente oscuro para Italia, y es precisamente aquí donde un hombre bueno se da cuenta hasta qué punto la sociedad lo ha corrompido internamente, y esto puede tornarse insoportable. De lo que se está tratando es de dar cuenta de los distintos rostros que puede tener la violencia, ya sea después de Garibaldi (fines del siglo XIX, principios del XX) --en el caso de uno de los secuestros-- o en la actualidad --como es el caso del otro secuestro-- y en la época del fascismo --como se ve en el episodio de "Felice"--. Pero pese a estas historias, que se encuentran unidas por este hilo rojo de violencia, también se cuentan grandes historias de amor y de energía vital, porque nos interesa que se sepa que en la vida puede caber un encuentro de amor, como cuando el personaje de Felice se reencuentra con su antigua compañera de coro, y uno piensa que nace un amor, aunque no siempre se concrete. En el caso del niño secuestrado, retomamos un fresco del Giotto, en el que habla del dolor de los niños y de los inocentes. El niño está solo en la montaña, pero cuando se encuentra con esta obra, entiende claramente que, en realidad, no está solo, porque ha habido alguien que ha comprendido su dolor, y esto lo hace estar acompañado. Y ya aquí se encuentra en una situación amorosa. Es por todo esto que el encuentro con Pirandello no fue expresamente buscado. Nunca pretendemos ilustrar una página literaria. El cine sigue siendo un lugar importante para contar historias.

  --¿Cuál es la modalidad de trabajo con su hermano?

  --Paolo y yo solemos reunirnos en un parque que está cerca de nuestras casas. Durante toda la mañana caminamos y hablamos de cosas serias y de otras que no lo son tanto, de las cosas que nos gustan y de las que no, y también de lo que llamamos "nuestra pesadilla nocturna": se trata de aquellas preguntas que tienen que ver con nuestras vidas personales. Trabajamos siempre caminando. A veces, una página de una novela o una noticia en el diario pueden ser el medio para aclarar las dudas, después escribimos seis páginas. Una vez escritas las guardamos, y por unos meses nos olvidamos. Hasta que pasa el tiempo y la abrimos, y la página es como un documento para ver qué habíamos pensado antes. En la mayoría de los casos no está bien, aunque puede ocurrir que sí. Nos sentamos cada uno de un lado de la mesa para escribir el guión y empezamos a armar cada escena. Para comenzar a filmar las escenas, llevamos algunos fragmentos de la música, aunque no estén terminados. Aquí, nos encontramos en el momento de las tomas, que es desde el comienzo, la parte más difícil. Trabajamos sobre eso muy temprano por la mañana hasta que arribamos a una definición. Puede que el primer encuadre lo dirija Paolo y yo esté en el monitor muy callado observando. Ya existe una suerte de telepatía aunque no se hable. Un gesto nervioso, un golpe, pueden indicarle a Paolo que no estoy de acuerdo. Cuando finalmente terminamos con ese encuadre, cambiamos.

  --¿Y los actores a quién se dirigen?

  --El orden que nos toca es aleatorio. Por ejemplo, cuando Mastroianni trabajó con nosotros, se ponía un poco nervioso y para solucionar esta duda de no saber a quién dirigirse gritaba "Paolo-Vittorio", y así fue como cuando llegó a Cannes, los periodistas le preguntaban cómo era trabajar con dos directores, y él, sorprendido, respondió: "¿cómo, eran dos?". Cuando nos encontramos con los hermanos Coen les preguntamos "¿Cómo hacen para trabajar juntos?" Y ellos tampoco lo saben. Es un misterio que aún no podemos explicar. Despues de todo el cine empezó con dos hermanos.

  --¿Tienen una relación dialéctica?

  --Sí, dialéctica y espantosa. Tenemos la misma casa en la playa, pero tratamos de veranear separados.

  --¿Qué significa hacer cine para ustedes?

  --Creo que el cine, como todos los lenguajes artísticos, trata de captar una parte de la realidad a través de un lenguaje específico, y creo que si esto se logra en la obra, sirve a todo lo demás, porque ayuda a conocer más de la realidad. Otros hombres en sus campos específicos: científicos, políticos, etc. aportan también otros fragmentos de la realidad. Ahora bien, como nuestro fragmento puede ser útil a los otros, juega una suerte de intercambio con los demás aportes que reciben. Considero al cine y al arte en general, como un derecho de la humanidad, porque el hombre en la vida corre y en un momento necesita parar y mirar, y tal vez haciéndolo, en este caso hacia la pantalla, pueda encontrarse un poco a sí mismo.

  --¿Cómo está el cine hoy en Italia y en el mundo?

  --El cine es un lenguaje que ha progresado, ha pasado del mudo al sonoro, del blanco y negro al color. Hoy creo que el aporte y contacto con la televisión ha sido importante y productivo. La incorporación de nueva y sofisticada tecnología es útil cuando se pone al servicio del hombre, y no cuando es el hombre quien se inclina ante las grandes máquinas y la técnica. El cine se fue complicando tecnológicamente, pero no permitió que se lo destruyera. Está el caso de Kiarostami, quien inventó un cine de una simplicidad magnífica, y sin embargo Schwarzenegger no aporta demasiado haciendo lo que hace. Muchos directores jóvenes insisten con el remanido: "todo está hecho". Sabemos que siempre se encuentran cosas que ya han sido mamadas anteriormente, tal es el caso de los mitos, pero si se los cuenta a la luz de un hecho, se les puede dar un significado especial.

  --¿Es entonces un lugar de convergencia de las artes para ustedes?

  --Pensamos al cine como el arte más importante del siglo XX, porque el cine aglutina la música, la pintura, la literatura, etc. y todas ellas conforman el lenguaje cinematográfico. El cine debe servir para plasmar elementos de la realidad y así tener la posibilidad de confrontarnos con ella, pero como decía Rosellini: "Los mensajes los trae el cartero".

  --¿Podría mencionar algo sobre el neorrealismo y su relación con él?

  --Mi madre diría: "Cada estación tiene su canción", y el neorrealismo nace con la guerra, y se desarrolla a propósito de ella. Eran momentos en que el bien y el mal estaban claramente diferenciados. La realidad era muy evidente, y directores como Rosellini dijeron que el contenido de sus películas tenían más valor que su trabajo porque había una realidad que hablaba. La capacidad e intuición de captar la misma fue la fuerza que tuvo el neorrealismo. Cuando el bien y el mal comienzan a entremezclarse, el neorrealismo ve dificultada su razón de existir. Pero las raíces maravillosas de este movimiento están, y conformaron una especie de árbol que se fue abriendo en distintas ramas; algunas generan lindas flores, y otras mueren o se secan.

  --¿Cómo fue su contacto con la izquierda?

  --La vida es bella porque sufre cambios permanentemente. Voy a hablar de la experiencia italiana, que es bien diferente de la rusa. Para Italia, el comunismo significó la liberación del fascismo a través de la lucha, luego fue la ilusión de una gran utopía de justicia y la creación de una gran fuente de solidaridad en el momento en que todos estos valores se contraponían a un poder de derecha. Hoy, la realidad es más tranquila y calma, pero esos valores siguen vigentes. Así como en distintas épocas hizo falta disparar fusiles y hoy no, resulta necesario encontrar nuevas maneras.

  --¿Han tenido preferencia por algún actor?

  --Hubo un actor que mezclaba magistralmente lo grotesco y lo dramático, provocando mucha emoción. Era un actor verdaderamente genial, y un delincuente. Gian Maria Volonté era un hombre destructor, un hombre extraño, un hombre que a través del arte del actor descubría sentimientos de la humanidad. Como hombre, era difícil y violento. Cuando estábamos por hacer Padre Padrone, le propusimos a él el personaje del padre, creyendo que le daríamos primacía al personaje de Gabino, y no al suyo. Trató de boicotear de diferentes modos el proyecto. Cuando llegó el momento de filmar, no hubo modo de encontrarlo. Había desaparecido, y se prometió destruir el film.

  --¿Cómo resuelven el tema de costos?

  --Al principio, para filmar les pedimos plata a los parientes y amigos. Después tuvimos la suerte de encontrar un productor que ama la cultura; con Padre Padrone cambió la historia. Pensábamos que era una película tan particular que jamás saldría bien parada, sin embargo tuvo éxito en todo el mundo. Después nos llovían propuestas desde toda Europa con historias donde la madre les pegaba a los hijos, los hijos le pegaban a la madre, y así de seguido. Así fue como llegamos a conseguir más apoyo para poder producir nuestros proyectos y vivir de esto.

  --¿Qué es lo próximo?

  --De los proyectos futuros no se habla porque dicen que trae mala suerte.

 

PRINCIPAL