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FAVALORO LE MANDO UNA CARTA A DE LA RUA PIDIENDO AYUDA
�Estoy verdaderamente desesperado�

El propio Presidente reveló que la carta desesperada llegó el viernes, aunque la abrió recién el lunes. Allí Favaloro le pedía que intercediera ante empresarios a fin de obtener dinero. Según contaron fuentes de la Fundación a este diario, el cardiólogo estaba angustiado por los despidos que se habían iniciado y la posibilidad de tener que reducir las tareas de investigación.

Varios centenares se reunieron ayer en la Fundación para manifestarle su apoyo.
En la última semana allí habían sido despedidas diez personas por las dificultades económicas.

La gente volvió a dejar todo tipo de mensaje en las puertas de la Fundación Favaloro.  En los carteles y los gritos, se acusaba a las instituciones de ser indiferentes al médico.


Por Eduardo Videla

t.gif (862 bytes) �Estoy verdaderamente desesperado�, había escrito René Favaloro en una carta que el viernes llegó a manos del presidente Fernando de la Rúa. �Me pedía si podía interceder ante empresarios para obtener un aporte de seis millones� que le permitiera continuar con su obra en la Fundación, reveló anoche el Presidente. De la Rúa envió esa carta al juez Daniel Turano, quien interviene en el caso del suicidio del cardiocirujano, para que la tome como �elemento de valoración�. Además de la crisis financiera que afligía a la fundación, Favaloro estaba angustiado por la posibilidad de tener que despedir a 300 de las 1100 personas que trabajaban en la institución, o reducir las tareas de investigación, posibilidades sugeridas tras la intervención del ingeniero Angel Perversi, quien había llegado a la fundación de la mano del propio Favaloro, como asesor ad honórem, según confirmaron a Página/12 distintas fuentes vinculadas al centro médico. La última semana, agregaron, fueron despedidas unas diez personas, una de ellas, el jefe de Intendencia de la fundación, que acompañaba a Favaloro desde sus comienzos.
La carta de Favaloro a De la Rúa, con un dramático pedido de auxilio, ayuda a comprender la situación anímica por la que estaba pasando Favaloro y se suma a otra que había enviado a un matutino, hace poco más de un mes, en la que decía que estaba pasando por �el peor momento de su vida� y que se había convertido en �un mendigo�, en su intención por cobrar lo que le debían. El contenido de las dos cartas se conoció recién después del suicidio. De la Rúa dijo anoche, por América 2, que la nota llegó el viernes a Presidencia pero él la abrió recién ayer.
Según contó el Presidente, Favaloro le pedía que �intercediera ante empresarios para lograr donaciones por 6 millones de pesos� destinados a su Fundación. De la Rúa había recibido días atrás al cardiocirujano, y en esa reunión Favaloro le pidió que el Gobierno intercediera para gestionar un crédito ante el Banco Interamericano de Desarrollo, para refinanciar una deuda de 30 millones con el Banco Nacional de Desarrollo residual y para cobrar una deuda del PAMI.
De la Rúa destacó que después de esa reunión hizo gestiones �ante directivos del ex Banade para la refinanciación de la deuda�. En la carta, �Favaloro decía que tenía que pasar por esta situación debido a que siempre se enfrentó al sistema�, reveló el Presidente. La nota terminaba con una frase premonitoria: �Estoy verdaderamente desesperado�. 
La carta está ahora en manos del juez, junto a las otras siete que dejó Favaloro en su departamento de Palermo Chico, que el juez mantiene aún bajo reserva. Ayer, la Fundación Favaloro le pidió por escrito al magistrado que libere al menos las que están dirigidas a los médicos de la institución. �Necesitamos saber si hay alguna voluntad del doctor referida a las actividades que se desarrollan en esta casa�, dijo a este diario una fuente de la entidad. El sobrino del cardiocirujano, Roberto Favaloro, destinatario de una de las cartas, estuvo ayer seis horas en el juzgado de Turano, donde prestó declaración.
La Fundación afrontaba una deuda de 50 millones de dólares, un monto similar a su facturación anual, lo que la hacía �perfectamente manejable�, según aseguró a Página/12 el gerente de la Fundación, Jorge Barrientos. Por otra parte, la institución reclama una deuda de 18 millones de pesos, de los cuales, casi 2 millones corresponden al PAMI. La legitimidad de este último monto estaba siendo revisada por una auditoría cuando el expediente pasó a la justicia federal, a raíz de una denuncia de la Oficina Anticorrupción para investigar si no hubo un pago de coima para cobrar una parte de esa deuda en efectivo: de los 2,8 millones que reclamaba Favaloro, y que debían pagarse en bonos, según un decreto presidencial, el PAMI, durante la gestión de Carlos Alderete, había pagado 800.000 en un cheque. La llegada de Perversi a la Fundación se produjo en el marco de la desesperada búsqueda de apoyo que Favaloro buscó entre empresarios poderosos, entre ellos, Enrique Pescarmona. La relación es extraña: Perversi, quien tuvo un paso poco exitoso por Bunge y Born, fue titular de la Anses durante la gestión al frente del PAMI de Alejandro Bramer Markovic, que no le pagó los dos millones que reclama Favaloro. Según trascendió, la asesoría de Perversi concluyó que la Fundación estaba sobredimensionada. �Favaloro no podía tolerar que echaran gente, y menos a la gente de su confianza, ni tampoco una disminución en la excelencia de la institución�, dijo a Página/12 un médico cercano al cirujano fallecido.
Otras fuentes, vinculadas a la conducción de la Fundación, reconocen que las finanzas se resintieron con el corte de subsidios por parte del Estado, en 1998. En cinco años, Favaloro había recibido 66 millones en ese concepto. �Se intentó compensar esa suma incorporando servicios a nuevas obras sociales, pero muchas de ellas se cayeron, como la Bancaria y la UOM, y eso contribuyó a agravar la situación�, aseguró la fuente. La situación se agravó en el �97, cuando se empezó a gravar la importación de insumos médicos, y en enero de este año, con la aplicación del IVA a las empresas de salud. Estas circunstancias llevaron al célebre creador del by pass a formular sus últimos llamados desesperados. Las respuestas no llegaron a tiempo.

 

 

El suicidio y la culpa según expertos

�Que el Gobierno salga a decir que no siente culpa por el suicidio de Favaloro da a entender que alguna responsabilidad siente. Si a mí me responsabilizan por un choque en una calle en la que no estuve, no me hago cargo ni tengo por qué salir a aclarar nada�, reflexionó Carlos Martínez, titular de la Asociación Argentina de Prevención del Suicidio, sobre las declaraciones del secretario de la Presidencia, Jorge de la Rúa (ver aparte). 
Martínez analizó el fenómeno social que generó la muerte de Favaloro. �En un suicido convergen tres factores: aspectos individuales, familiares y sociales. Es evidente que la gente puso el énfasis en lo comunitario, en lo social. Hay un registro tácito que hace pensar que, si a un hombre como a él le ocurren estos problemas financieros, qué les queda a los demás, que no tenemos su fama ni su reconocimiento internacional�, consideró Martínez. 
Para la doctora en Psicología e investigadora del Conicet, María Martina Casullo, el suicidio del cardiocirujano tuvo tanto impacto en la población �porque, de alguna manera, es un personaje preocupado por temas no resueltos en el país como la salud�. �Es una especie de muerte vicaria�, añadió. 
Carlos Borontal, coordinador del Centro de Ayuda al Suicida, explicó que todo suicidio deja mensajes, generalmente encubiertos. �Si en las cartas de Favaloro hay alguna referencia explícita a la responsabilidad del Gobierno, las autoridades deberían, si no sentir culpa, por lo menos hacerse cargo. Pero hay que tener en claro que el Estado debería responder por la institución, pero no por la muerte de Favaloro, porque en un suicidio también entran en juego variables y circunstancias íntimas y personales que desconocemos. No sabemos con seguridad si hubiese sido buena la situación económica de la fundación, el cardiocirujano no se hubiera suicidado de todas formas�.

�La salud como un costo�

El suicidio de René Favaloro sirvió de �estímulo en la gente para descubrir la desgraciada situación que atraviesa la salud pública en la Argentina�, consideró Marcos Meerof, fundador y titular de la Sociedad de Medicina Antropológica y ex presidente honorífico de la Sociedad de Etica Médica. �Favaloro lo documentó muy bien: la salud está manejada por la economía y eso es un desastre. Por un lado, hay un 30 por ciento de la población que no tiene ninguna protección de salud y no tiene a dónde ir a morir, y del otro, organizaciones privadas y sindicales corroídas por la corrupción. Favaloro estaba siempre prendiéndole velas a cada santo para conseguir que las obras sociales le pagaran�, resumió Meerof.
�Hay pobreza y desocupación y para la gente humilde no hay cobertura médica, algo que debería garantizar el Estado. Esto es lo que salió a la luz con la muerte de Favaloro�, continuó el presidente de la Sociedad de Medicina Antropológica. 
�La Medicina no es un producto que se vende en la Bolsa no puede quedar en manos privadas. Lo que tenemos en la Argentina es una medicina de negocio, que se vende. El problema es prioritario. La salud se ha convertido en un problema de costos y no de valor, de vida. Es un proceso muy profundo que exterioriza la crisis a la que condujo la economía neoliberal. Entonces, cada tanto aparece un hecho como el suicidio de Favaloro, que vuelve a destapar la olla y la gente toma conciencia de la realidad�, concluyó Meerof. 

Avisos fúnebres y enojo

Doscientos quince avisos fúnebres. El nombre de René Favaloro volvió a aparecer en cada uno de ellos, un día después de que otro centenar ocupara las páginas fúnebres del diario La Nación. El enojo se transparentó en algunos, como el publicado por una persona que sólo firmó con sus iniciales: S.M. de R. �Dios perdone a los necios corruptos por no escucharlo, los humanos no podremos�, decía. Otro aviso pidió perdón desde el anonimato: �Como ciudadana argentina pido perdón al Dr. Favaloro por no haber atendido sus desesperados requerimientos�, sostenía el texto identificado sólo por un número de documento. 
También hubo muchos nombres famosos. Entre los firmantes de los avisos aparecieron el presidente Fernando de la Rúa junto a su esposa y también con �los miembros del gabinete nacional�. Hubo asimismo textos del ministro de Salud, Héctor Lombardo, del Ministerio de Educación, y de la conductora Mirtha Legrand. Y cantidad de avisos firmados por profesionales y entidades médicas.

 

 

El Gobierno cree que no tiene �culpas que lavar�

En medio de la conmoción social que despertó la muerte de René Favaloro y el sentir popular de que la falta de respuestas gubernamentales a sus reclamos lo empujó a quitarse la vida, el Gobierno salió ayer a aclarar que no se siente responsable moralmente por el suicidio del cardiocirujano. �El Gobierno no tiene culpas que lavar ni quiere entrar en la polémica de si hay culpa o no culpa�, aseguró el secretario general de la Presidencia, Jorge de la Rúa, al finalizar la reunión de gabinete, donde se le rindió homenaje al famoso médico. Con el mismo eje, los ministros de Salud, Héctor Lombardo, y de Desarrollo Social, Graciela Fernández Meijide, insistieron en que el Estado no tenía deudas pendientes con la Fundación Favaloro, y anunciaron que se distinguirá al inventor del by pass con un premio post mortem como �Médico del Año�.
De alguna forma, el Gobierno se vio ayer presionado a deslindar su responsabilidad en la muerte del célebre médico. Desde el sábado, cuando fue encontrado con un disparo en el pecho en su casa del barrio de Palermo Chico, de la Capital Federal, fue creciendo en el imaginario colectivo -expresada a través de carteles frente a la Fundación Favaloro y mensajes en las radios� la idea de que el Estado lo mató con su indiferencia. El tema fue tratado en la reunión de Gabinete de ayer. Tres funcionarios de máximo nivel asumieron la tarea de limpiar la imagen gubernamental.
�El Gobierno no tiene culpas que lavar ni quiere entrar en la polémica de si hay culpa o no, porque pensamos que oscurecemos la memoria y el homenaje al profesor Favaloro�, afirmó el hermano del Presidente. Y agregó: �No hay ánimo de salir a polemizar porque entendemos que no hay polémica. Acá hay una unidad en el homenaje del doctor Favaloro y la situación puntual de la fundación es una cuestión que debe examinarse con serenidad en el tiempo y buscando mantener la obra y el espíritu de Favaloro�.
Lombardo volvió a insistir en que el Estado, a través del PAMI, había pagado a la fundación los fondos que correspondían, salvo a una deuda anterior cuya resolución está en manos de la Justicia. El ministro aclaró, además, que su cartera no tenía ningún pago pendiente con la institución. �El 21 de mayo pagamos todas las prestaciones que llegaron al ministerio por 2 millones� y precisó que esa cifra corresponde a pacientes sin cobertura. Lombardo se refirió también a la reunión que había mantenido Favaloro con el presidente De la Rúa días antes de su muerte. En el encuentro �no se llegó a ningún acuerdo puntual�, ya que el jefe de Estado sólo se comprometió a facilitarle la gestión de un crédito internacional con el BID, puntualizó. De sus últimos encuentros con el médico, Lombardo dijo: �Conmigo jamás habló de cifras�, y nunca le hizo un planteo �tan acuciante�. El ministro anunció que el dinero del premio �Médico del Año� que se le dará post mortem a Favaloro se donará �al lugar donde pesamos que él hubiera querido que se destinaran los recursos�.
Fernández Meijide hizo declaraciones en el mismo sentido. La ministra explicó que revisó si la anterior gestión tenía alguna deuda con la fundación que presidía Favaloro, pero no encontró ninguna. La funcionaria reveló además que el cardiocirujano estuvo reunido con funcionarios del Ministerio de Economía �por un crédito impago que su institución había obtenido del Banco Nacional de Desarrollo (Banade) años atrás�.

 

 

opinion
Por Jorge Vázquez (*)

La angustia terminal

Con la precisión con que operaba, con las mismas manos, en el mismo corazón que curaba, esta vez, y por única y última vez, el Dr. Favaloro, cambió sus pequeños instrumentos por una pistola y se mató. Hoy se manejan conjeturas y análisis de menor cuantía. Entre el fútbol, la muerte de Rodrigo y las angustias económicas de gran parte de nuestra gente, caerá mezclada la angustia terminal de uno de los sabios de nuestro tiempo.
Ahí queda la cosa. Pero no es así. Su testimonio a través de los años de humildad, caridad y entrega al prójimo sólo produce comentarios tardíos de las llamadas �clases dirigentes�, fundamentalmente la cava-alsogamenemista.
¿Dónde estaban cuando el doctor recorría pasillos pidiendo ayuda para su Fundación, es decir, pidiendo ayuda para sus pacientes, sus discípulos y sus investigadores? Estaban sí, para la foto. Estaban sí, para proponerle la cabeza de lista de diputados para que arrastrara sus licuadas figuras en las �listas sábana�. No estuvieron, y parece que no seguirán estando, para sostener su Fundación.
Cuando el sector privado no escuchó sus humildes gestiones, el Estado en carácter subsidiario debió y debe hacerse cargo de tan noble y prestigioso emprendimiento. El Estado ausente sin aviso y las llamadas �clases dirigentes� y los ladrones de ramos generales, ajenos al destino de la Patria y de su gente, causaron otra muerte. Diagnóstico: murió de pena, de desesperanza aguda. Y nada más, como mueren diariamente de pena tantos ciudadanos anónimos, como van muriendo de pena los niños. 
Como decía Lavoisier: �En la naturaleza nada se pierde, todo se transforma�. Quiero decirles, señoras y señores, que también en política ocurre lo mismo. La indiferencia de los jóvenes, la legítima protesta social, las pastorales de la Iglesia Católica, la idolatría por Rodrigo, la adhesión a iglesias truchas y tantas otras cosas no son más que un prólogo de lo que puede venir. A la �clase dirigente� le digo que hoy no se puede trabajar de meteorólogo mirando el cielo para ver el tiempo, ni guiarse obstinadamente por las encuestas. Más bien les recomiendo que trabajen como geólogos tratando de auscultar el fondo de la tierra, es decir, el Alma Interior de la Nación. Pero además quiero decirles que el 2000 está lejano y que es ahora. Este es el mandato y, como no hay suicidios colectivos, más tarde o más temprano �y nuestra historia lo demuestra�, puede venir un loco, un �iluminado� o alguna otra especie parecida a Fujimori.

* Ex embajador argentino ante la ONU

 

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