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Otro premio para Nicanor, el enemigo de los premios

 

El �antipoeta� chileno Nicanor Parra obtuvo la décima edición del Reina Sofía de Poesía Iberoamericana. El mes pasado, el hermano de Violeta Para había pedido públicamente �terminar con los premios�.

 

El poeta chileno Nicanor Parra obtuvo ayer, a sus 86 años, el X Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, galardón dotado con seis millones de pesetas (alrededor de 30.000 dólares), e instituido hace diez años por Patrimonio Nacional y la Universidad de Salamanca, en España. Parra se convirtió así en el segundo poeta chileno que obtiene este premio, ya que la primera edición había sido ganada por Gonzalo Rojas. Claudio Rodríguez, José Angel Valente, José Hierro, Alvaro Mutis, Angel González, Mario Benedetti y Pere Gimferrer han sido los otros galardonados. El vicedirector de la Real Academia de la Lengua y miembro del jurado del galardón, Gregorio Salvador, señaló ayer que el premio es mása que merecido porque el hermano de Violeta Parra“es uno de los más grandes poetas de la historia de la lengua española.”
El jurado de esta edición estuvo presidido por el duque de San Carlos, Alvaro Fernández-Villaverde, y formado entre otros por el director de la Real Academia de la Lengua, Víctor García de la Concha, y dos premios Nobel de Literatura, el español Camilo José Cela y el portugués José Saramago. Además del dinero, el premio incluye la publicación de una antología y otra serie de actividades paralelas en torno al poeta.
Nacido en La Reina (Chile), el 5 de septiembre de 1914, casado en segundas nupcias y con siete hijos, Nicanor fue el creador de la denominada “antipoesía” o “poesía de lo cotidiano”, una revolución literaria mediante la cual introdujo, de forma explosiva y desafiante, el lenguaje cotidiano en la poesía tradicional. “Los artefactos de Parra”, como él mismo los denomina, consisten en una serie de poemas acompañados de imágenes, cargados de ironía y sarcasmos, “que no se incluyen en la categoría de arte, sino que están en los suburbios del arte”, según su propia definición. El galardón se suma a la lista de premios que ya posee el autor, entre los que destacan el Premio Nacional de Literatura de Chile (1954), el Premio Municipal de Santiago (1937) y el Premio Internacional de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo (1991). El 29 de mayo pasado obtuvo el Premio Bicentenario 2001, que le concedió la Corporación del Patrimonio Cultural y la Universidad de Chile. En 1997, el Gobierno de Chile presentó, a través de su Embajada en Estocolmo, la candidatura del poeta al Premio Nobel de Literatura, y en repetidas ocasiones formó parte de la lista de posibles premiados con el Cervantes.
Sin embargo, el creador de Meditaciones del Cristo de Elqui y Hojas de Parra abogó en la entrega del Bicentenario por suprimir los premios literarios (“Terminamos nosotros con los premios o los premios terminan con nosotros”, dijo) y se declaró en más de una ocasión convencido de tener más posibilidades con la lotería que con el Nobel. Resulta también más cómodo, según sus palabras, unirse a Jorge Luis Borges, César Vallejo y otros grandes de la Literatura en la lista “de los condenados de antemano” por la Academia Sueca.
Unico superviviente del cuartetp más famoso de poetas chilenos que incluye a Vicente Huidobro y los premio Nobel Gabriela Mistral yu Pablo Neruda, Parra tiene una formación académica científica, ya que se licenció en Ciencias Exactas y Físicas. Gracias a eso escribió varios trabajos de carácter científico, entre los que destacan La evolución del concepto de masa y Fundamentos de la Física, y es autor también de una traducción calificada por el medio literario como “brillante” de la obra de William Shakespeare El rey Lear. Comprometido con la democracia y parte de una familia con numerososmilitantes de la izquierda chilena, en mayo de 1988 tomó parte en el “Frente Amplio de Intelectuales por el No”, constituido con motivo del plebiscito convocado por el ex dictador Augusto Pinochet, que lo perdió.

Poemas Violetas Parra

hay que pavimentar la cordillera
pero no con cemento ni con sangre
como supuse en 1970
hay que pavimentar con violetas
hay que plantar violetas
hay que cubrirlo todo de violetas
humildad
igualdad
fraternidad
hay que llenar el mundo de violetas
La muerte supersónica
pasa a toda velocidad
en dirección al Asilo de Ancianos
sin concederme la menor importancia
como si yo fuera un adolescente de labios rojos
a sabiendas que soy su prometido
y que ya no hago otra cosa que bostezar
muerte evasiva - muerte displicente
eres la más coqueta de todas.

Dos sobre Borges.
Con lágrimas
en los ojos
Un anciano prodigio
de cuyo nombre no podré olvidarme
se despide de todo.
Dice que no quiere ser recordado.
Lo sentimos muchísimo por supuesto
pero no le daremos en el gusto.
Nunca podremos prescindir de él.
Ofrezco la palabra.
Borges
Un autor del Quijote.
Un asesino desinteresado.
Un Quevedo del Río de la Plata.

 

 

 

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