| Por Javier Lorca   Además de la decisión 
        de los gremios docentes de no reanudar las clases, ya son dos las universidades 
        que, según sus autoridades, iniciaron la cuenta regresiva hacia 
        el default, gracias al recorte presupuestario. Nuestras posibilidades 
        financieras llegan hasta octubre. Más allá no vamos a tener 
        recursos para afrontar los gastos de funcionamiento, aseguró 
        a Página/12 el rector de la Universidad Nacional del Comahue, Jorge 
        Rabassa, quien afirmó también que todas estas medidas 
        de ajuste buscan el arancelamiento. Octubre es la misma fecha que 
        fue puesta como tope por la conducción de la Universidad Nacional 
        de La Plata, como informó este diario. Ante este escenario, el 
        secretario de Educación Superior, Juan Carlos Gottifredi, opinó 
        que los rectores son adivinos y detalló: Todavía 
        no hay un panorama claro y no sabemos cuánta plata vamos a poder 
        enviarles a las universidades en los próximos meses. Mientras 
        tanto, la movilización de los docentes y empleados universitarios 
        no cede. Con 25 mil estudiantes distribuidos en catorce sedes asentadas en Neuquén 
        y Río Negro, la Universidad del Comahue atraviesa una situación 
        crítica: Nuestros recursos de funcionamiento han sido afectados 
        al igual que las partidas de salarios explicó el rector. 
        A este ajuste hay que sumarle las deudas acumuladas por el Estado desde 
        1998 y la subejecución de este año. Tenemos un total aproximado 
        de 4 millones y medio de pesos faltantes. Para octubre, la universidad 
        entraría en la imposibilidad de hacer frente al pago de servicios 
        y de gastos, concluyó. De hecho, el Estado les debe a las 
        universidades parte de los presupuestos de 1999 y 2000 (compromisos no 
        devengados por 88 millones). La Universidad del Comahue tiene un presupuesto 
        anual de 42 millones, de los cuales, 36 se destinan al pago de salarios. 
        Esos 4,5 millones que nos faltan equivalen prácticamente 
        a los gastos de funcionamiento de un año apuntó Rabassa. 
        Si a esto le sumamos el recorte salarial del 13 por ciento, ya se agotaron 
        nuestras posibilidades financieras de seguir funcionando. No vamos a poder 
        afrontar los pagos. No sé si el país, pero las universidades 
        vamos a entrar en default, porque nosotros no podemos emitir bonos ni 
        salir a pedir préstamos.
 Consultado por Página/12, y tras considerar que algunos rectores 
        gozan de virtudes adivinatorias, el secretario de Educación Superior 
        dijo que desde el ministerio se van a tratar de garantizar los gastos 
        de funcionamiento.
  Paros y protestas A lo largo del país, continúan las protestas de los trabajadores 
        y la semana próxima, tras el receso, comenzarán las de los 
        estudiantes:
  En la UBA, se mantiene la decisión 
        de no iniciar las clases, pese a que julio se cobró sin recortes. 
        El gremio Aduba hará una asamblea este mes para definir las medidas. 
        La AGD, otro gremio, suspendió la toma de finales y hará 
        una asamblea mañana, a las 18, en Ingeniería. 
  En la Universidad de Córdoba, 
        sigue suspendida la toma de exámenes y mañana habrá 
        una asamblea general de los docentes. 
  Los docentes de la Universidad 
        de Mar del Plata, que harán una asamblea el lunes, mantienen el 
        no inicio de clases. La misma decisión sostienen los docentes de 
        la Universidad de La Plata, que hoy tendrán una asamblea. 
  El consejo superior de la Universidad 
        de Cuyo rechazó ayer el ajuste. Los docentes iniciaron un paro 
        hasta el 11 de agosto y los no docentes están en huelga hasta hoy. 
  La comunidad de la Universidad 
        de Rosario se movilizó ayer, cuando sesionó el consejo superior. 
        Tomando un préstamo de la caja compensadora, se pagarían 
        los sueldos de julio sin ajuste. 
  En la Universidad de Entre 
        Ríos tampoco se iniciarían las clases. En algunas facultades 
        se toman exámenes y en otras, no. 
  Los trabajadores de la Universidad 
        de Formosa están en huelga. 
  Ayer hubo asambleas en las 
        facultades de la Universidad de Tucumán y mañana habrá 
        una marcha desde el Rectorado hasta la Plaza Independencia. 
  La FUA, la Fatun y la Conadu 
        acordaron un plan de lucha nacional en conjunto. Harán marchas 
        regionales y una marcha nacional el miércoles 22. 
  La Conadu hará un plenario 
        el sábado, a las 11, en la Facultad de Farmacia de la UBA. 
  La FUA hará un nuevo 
        encuentro de su congreso nacional universitario mañana y pasado 
        en Tucumán.   
         
          | Para el tiempo libre... (si 
              queda) |  
          | Debate. Hoy, desde las 15, se harán dos debates sobre 
            modelos y recursos del sistema universitario. Participarán 
            rectores, miembros de la Coneau y de la FUA. En Paraná 145, 
            5º piso, 4374-7300. Música. Mañana, a las 20.30; el sábado, 
            a las 18; y el domingo, también a las 18; seguirá el 
            ciclo de grandes conciertos en la Facultad de Derecho, en Figueroa 
            Alcorta 2263. Gratis.
 Cursos. La Facultad de Medicina (UBA) inscribe en sus cursos 
            de poesía, teatro, literatura, cine y otros. Informes: Paraguay 
            2155, piso 1º, 5950-9753.
 Sociales. La problemática de la enseñanza 
            de las ciencias sociales es el curso que dará el Consejo 
            de Profesionales en Sociología. Informes: Corrientes 2835, 
            cuerpo B, piso 7º B, 4964-2160.
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          | OPINIONPor El Mate *
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          | Los desafíos de la 
              crisis Las crisis no implican sólo dificultades y penas. Son también, 
              a veces, portadoras de enormes desafíos. Son, o pueden ser, 
              momentos en los cuales los rumbos que han llevado a la situación 
              crítica adquieren sorprendente nitidez. En medio del estallido 
              acelerado de la impresionante crisis económica que vive nuestro 
              país, han surgido, despojados de todo velo, tres cuestiones 
              que hacen al nudo del modelo de país: deuda externa, distribución 
              de la riqueza y democracia. ¿En qué consiste esta 
              nitidez? En que ya nada puede disimularse. Los silencios ya no ocultan. 
              Las palabras definen posiciones irremediablemente ideológicas 
              y los procedimientos se revelan ridículos o autoritarios. 
              Los silencios. El déficit cero no supone se 
              gasta lo que se recauda, implica más bien que cualquier 
              sufrimiento es justificable si su objetivo es honrar 
              la deuda. En el ejemplo preferido del Gobierno y los sectores financieros; 
              en la familia, el paralelo sería el siguiente: Si los 
              ingresos no alcanzan para que todos coman, habrá que deshacerse 
              de los miembros que sobren (primero el abuelo).
 Las palabras. Pese a que el ajuste puede tener diez o veinte variantes, 
              en los últimos días fue imposible esconder bajo la 
              alfombra que sólo hay dos opciones para dejar de endeudarse 
              y nos ponen de lleno frente al problema de la redistribución 
              de la riqueza. O los recursos se obtienen, como propone y viene 
              llevando a cabo el Gobierno, de los asalariados, jubilados y los 
              sectores más castigados de la sociedad, o bien, se toca el 
              bolsillo de las AFJP, las empresas privatizadas y los sectores más 
              beneficiados de la sociedad.
 Los procedimientos. Acto 1: El señor Escasany da la orden. 
              Acto 2: El Gobierno decreta. Acto 3: Los diputados votan. Defender 
              la democracia no puede ser quedarse callado ante la ridiculez y 
              el autoritarismo.
 Sin embargo, no somos ingenuamente optimistas. Esta crisis ya tiene 
              una solución para los poderosos. Si la salida de la última 
              gran crisis de la economía argentina, la de 1989, estuvo 
              determinada por la privatización vergonzosa de las empresas 
              públicas y la convertibilidad, la actual crisis tiene para 
              los sectores dominantes tres blancos fijos: educación, salud 
              y sistema previsional. Con las consecuencias a la vista de aquellas 
              privatizaciones no podemos dejar que Aerolíneas se convierta 
              en una triste anticipación de lo poco que le queda a nuestro 
              país.
 Dentro del ataque generalizado contra la educación pública, 
              la universidad sufre directamente las consecuencias de este último 
              ajuste que, de yapa, pone en juego la autarquía universitaria. 
              Hoy es necesario que la comunidad universitaria, al mismo tiempo 
              que se enfrenta al recorte feroz del Gobierno, discuta cómo 
              la educación superior encuentra formas creativas y sólidas 
              de compromiso social y político con los sectores populares. 
              La mejor forma de enfrentarse a los embates del neoliberalismo es 
              construir una universidad crítica y solidaria cuyo destino 
              esté atado al de una sociedad justa, democrática y 
              soberana.
 * Agrupación estudiantil de la Facultad de Ciencias Sociales 
              (UBA). |    |