Nuevamente, las fuerzas de seguridad encabezaron otro operativo de desalojo y represión contra mapuches en la Patagonia. Esta vez fue en Bariloche, contra la comunidad Lafken Winkul Mapu, cuyos integrantes habían ingresado el 14 de septiembre a una zona lindera a Lago Mascardi, que está bajo la jurisdicción de Parques Nacionales y que los pueblos originarios reivindican como territorio propio. Hubo heridos con balas de goma, además de "mujeres y niños detenidos y atados con precintos".

 

 

 

El operativo movilizó a más de un centenar de miembros de Gendarmería, de Prefectura y de la Policía Federal, quienes bajo las órdenes del juez federal Gustavo Villanueva cortaron durante horas el tramo de la ruta 40 que une las ciudades de Bariloche y El Bolsón, que quedaron completamente incomunicadas. Decenas de móviles fueron apostados en el lugar y hasta un helicóptero sobrevoló la zona del conflicto.

 

 

 

Según los testimonios recogidos por Página/12, los uniformados entraron al territorio y detuvieron a siete mujeres y cinco adolescentes. El resto de los integrantes de la comunidad, hombres en su mayoría, huyó hacia el monte. Los detenidos fueron liberados recién esta noche, cerca de las 21.

 

 

 

 

 

 

Tras sucesivas intimaciones a desocupar el predio, ayer la Justicia notificó a la comunidad Lafken Winkul Mapu que el desalojo sería "inmediato”, ante lo cual los mapuches solicitaron la mediación del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas y adelantaron que resistirían el ingreso del personal de las fuerzas de seguridad "vestido de civil".