Las Madres se movilizarán desde su sede en Yrigoyen 1584 hacia el Congreso, donde desde temprano una multitud repudia el “ajuste a los jubilados” que implicará una pérdida en su poder adquisitivo y una quita de alrededor de 100 mil millones anuales.

 

La decisión de suspender la tradicional ronda de las 15,30 en la Plaza de Mayo estuvo acompañada por una carta de la titular de la Asociación, Hebe de Bonafini, en la que advirtió a los legisladores nacionales que "la patria está en las calles pidiendo justicia y libertad, no nos sigan respondiendo con la muerte”. Más adelante reclamó que no voten las “leyes de esclavitud” y resistan las inciativas que impulsa la alianza Cambiemos. “Si el voto de ustedes aprueba las leyes de la vergüenza, los rostros de nuestros niños descalzos y hambrientos, junto a los ancianos abandonados, los perseguirán mientras vivan y ése será nuestro castigo, esas imágenes no los dejarán dormir y los perseguirán donde estén”, agregó.

En su carta, la titular de Madres resaltó que “millones estaremos en sus manos”, a pesar de que “el pueblo no votó hambre, desocupación, desamparo, humillación”. “Piensen bien qué van a hacer, a favor de quién van a estar. Los niños y los ancianos estamos indefensos en el medio de un bosque lleno de víboras y todo tipo de alimañas”, subrayó Bonafini, quien además destacó que esta tarde “el pueblo en las plazas y en las calles saldrá a pedirles que piensen qué van a votar: esclavitud, o libertad y justicia”.