“Cuando se la llevaban no cacareábamos, ahora cuando tienen que poner, tienen que poner. Es una cuestión de decisión política. Los que más tienen que aportar son los operadores y el gobierno nacional.” Así de tajante fue el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, quien le reclamó a Mauricio Macri sentarse en la mesa de negociaciones para resolver la crisis petrolera que podría dejar sin trabajo a 6000 personas, sumado a un fuerte desfinanciamiento de las provincias productoras de hidrocarburos. El conflicto radica en que Chubut produce un tipo de crudo pesado que se exporta casi en su totalidad. El barril cayó ayer por debajo de los 27 dólares, el valor más bajo de los últimos doce años. El reclamo del gobernador, sumado al de todos los gremios, es que el Gobierno coloque un precio sostén al crudo de la provincia cercano a los 54 dólares, tal cual ocurre con los barriles que se producen para el mercado interno. Las declaraciones de Das Neves fueron realizadas luego de la reunión mantenida con los ministros de Interior (Rogelio Frigerio), Energía (Juan José Aranguren) y Trabajo (Jorge Triaca). La semana que viene seguirán las negociaciones con las petroleras.

El año pasado, Chubut aportó en concepto de retenciones a las exportaciones de crudo 14.000 millones de pesos. Para el intendente de Comodoro Rivadavia, Carlos Linares, al Gobierno nacional le costaría aproximadamente 300 millones de dólares anuales sostener el precio del barril que se exporta. “No hay una solución mágica a esta situación, es un combo de situaciones que tienen su origen en el derrumbe del barril de petróleo y las operadoras son reticentes a mantener el nivel de inversión que llevaban”, sostuvo Das Neves en declaraciones a C5N. Las empresas involucradas en este conflicto son tres: YPF, Tecpetrol y PAE.

Si bien la semana que viene, entre lunes y martes, habrá un nuevo encuentro entre el gobierno nacional, el gobernador de Chubut, los gremios y las empresas operadoras, el reclamo hacia Macri es doble. Por un lado, se pide un precio sostén para el crudo que se extrae en esa región y por otro lado, hay un cuestionamiento a la decisión de transferir recursos a las provincias más ricas del país, en detrimento de las jurisdicciones de la Patagonia. Este reclamo engloba la reciente modificación de la alícuota de coparticipación para la Ciudad de Buenos Aires y la enorme transferencia de recursos producto de la devaluación para las provincias sojeras que concentran el 90 por ciento de la producción (Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba).

El crudo que se comercializa en el mercado interno está desdoblado del precio internacional. Hasta fines de diciembre, el barril local se vendía por encima de los 70 dólares pero Macri y Aranguren redujeron en un diez porciento ese valor. Actualmente, el crudo de la cuenca neuquina es comercializado en torno a los 67 dólares por barril, mientras que el más pesado ronda los 54 dólares. Esa disminución también afectó los ingresos de las provincias petroleras por una reducción de sus regalías.

“Nos quieren meter miedo desde el gobierno nacional diciendo que van a importar combustibles. Pero nosotros no nos vamos quedar de rodillas”, sostuvo el secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Chubut, Jorge Avila. Hoy habrá una movilización en Comodoro Rivadavia. Aproximadamente 20.000 trabajadores no concurrirán a las áreas de producción para manifestarse en la ciudad chubutense.