El Gobierno amplió el alcance y actualizó los valores del beneficio del Programa de Inserción Laboral, que busca impulsar la reincorporación de trabajadores desocupados. También se extendieron los plazos de adhesión al programa. La medida se toma en el contexto de una serie de iniciativas para frenar la tendencia al deterioro en el mercado laboral, entre las cuales se destaca Proemplear. Ese programa supone una ampliación del Repro, que permite evitar los despidos, y el lanzamiento de un plan de pasantías pagas por parte del Estado para que los jóvenes inscriptos en el Progresar mejoren su inserción laboral.

En el Programa de Inserción Laboral participan “trabajadoras mujeres, trabajadores cuya identidad de género no sea coincidente con el sexo asignado al momento de su nacimiento y para las micro, pequeñas o medianas empresas radicadas en parques industriales o que formen parte de una cadena industrial de valor incluida en el Plan Estratégico Industrial 2020”, definió la cartera laboral. También los beneficiarios de programas de capacitación, seguros de desempleo, jóvenes del Progresar y desocupados con alguna discapacidad.

Los beneficiarios del Programa de Inserción Laboral recibirán una ayuda económica a cargo de la cartera laboral de 2700 a 1500 pesos por una jornada completa en función de que sean contratados por una micro, pequeña, mediana o gran empresa, mientras que por una jornada parcial el subsidio irá de 1300 a 650 pesos, también dependiendo del tamaño de la compañía. Para los empleadores, el plazo para que los trabajadores de ese programa se desempeñen en las empresas va de un mes a un año.