EL PAíS › LA CGT DE MOYANO Y LA CTA DE MICHELI REALIZAN HOY UNA PROTESTA DE 24 HORAS CONTRA EL GOBIERNO NACIONAL

Un paro que busca hacerse fuerte con piquetes

Finalmente, no habrá movilización a la Plaza de Mayo. Los sindicalistas apuestan a cortar los accesos a la Capital Federal. A la medida adhirieron la Federación Agraria, que anticipó piquetes en las rutas, y la Sociedad Rural.

A partir de las cero hora de hoy comenzará el paro de 24 horas contra el gobierno nacional convocado por la centrales sindicales opositoras encabezadas por la CGT de Hugo Moyano y la CTA de Pablo Micheli, a la que también adhirió la fracción Azul y Blanca de Luis Barrionuevo. Aunque la movilización prevista a Plaza de Mayo finalmente quedó descartada, la CTA y grupos piqueteros volcarán sus fuerzas al corte de rutas y accesos a la Capital Federal, mientras la FAA movilizará a los ruralistas al borde de las rutas y “persuadir” a los conductores. Bajo el reclamo de modificación del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, la eliminación de los topes para las asignaciones familiares, contra la ley antiterrorista y de ART, el paro recibió el respaldo de la mayoría de los partidos opositores y de la Sociedad Rural. Camioneros paralizará la recolección de residuos, el transporte de combustibles y el abastecimiento de los cajeros automáticos, no habrá actividad bancaria ni vuelos de cabotaje, se pronostican inconvenientes en oficinas públicas, municipios y hospitales. En tanto, los principales gremios industriales enrolados en la CGT oficial que lidera Antonio Caló no se sumarán a la medida de fuerza, ni empleados de comercio y sanidad, tampoco el transporte público automotor (colectivos y taxis) ni los subterráneos, mientras que en los trenes –donde sólo la línea Sarmiento adhirió al paro– los servicios serán condicionales.

Moyano vaticinó que el de hoy será “un paro fuerte” en contra del Gobierno. “Todo el mundo ha preferido abocarse exclusivamente a que el paro sea lo más efectivo posible”, insistió el camionero para referirse a su propia tropa y las de sus nuevos aliados Micheli y Barrionuevo. “El reclamo es legítimo, nadie lo niega: lo comparten los que están con el Gobierno y los que no”, soltó para apuntar a la disputa con la CGT oficial y afirmar que los reclamos también serán acompañados por “gremios que, a nivel nacional, están en otro sector del movimiento obrero”.

La conducción cegetista alineada con Moyano ofreció ayer una rueda de prensa donde llevó la batuta el titular de Uatre, Gerónimo “Momo” Venegas. “Con el paro de mañana se pone de pie la Argentina porque los trabajadores tenemos que llevar adelante un plan de lucha, ya que no somos escuchados lo vamos a hacer”, advirtió el jefe de los peones rurales, quien también responsabilizó al secretario de Seguridad, Sergio Berni, sobre “cualquier disturbio” que pudiera ocurrir durante el paro. Allí también ratificaron la adhesión a la medida de fuerza, además de camioneros, los bancarios, los pilotos y técnicos aeronáuticos, municipales, petroleros privados, dragado y balizamiento, y peajes, entre otros.

“No sé por qué se asustan ahora algunos que la CTA va a cortar rutas y puentes si lo hemos hecho siempre”, se defendió Micheli ante la prensa. Justificó la decisión en los distintas organizaciones piqueteras y de izquierda que acompañarán los cortes: la CCC, Barrios de Pie, Movimiento Teresa Vive, Polo Obrero, el PTS, Nuevo MAS, la FUBA y la FAA. “De lo que se trata es que, quien tiene ganas de ir a trabajar, no vaya”, insistió Micheli, aunque remarcó que “tampoco los piquetes son de vida o muerte”. También le restó importancia a la decisión de abandonar la movilización prevista con el paro. “Ya llenamos la Plaza de Mayo dos veces”, argumentó. Apoyado en algunos gremios estatales, el paro de la CTA espera hacerse sentir en oficinas públicas, municipios y hospitales. “Queremos que el Gobierno se saque las vendas de los ojos y los tapones de los oídos”, insistió Micheli al augurar un paro “exitoso”. Cuestionó a los delegados del subte enrolados en la CTA que conduce Hugo Yasky, que no apoyan el paro. “Se puede ser oficialista, pero no se puede ser carnero”, les lanzó a los metrodelegados. Sólo la Línea B discutía anoche si sumarse al paro.

Hubo réplica. “No estamos de acuerdo con una medida de fuerza que los trabajadores no discutimos ni resolvimos y de la que se enteraron a través de la televisión”, dice un comunicado firmado por la CTA de Yasky. Allí también se afirma que, además del subte, tampoco se suman al paro los docentes de Ctera, los telefónicos, los obreros del neumático, los actores y la industria del cine, entre otros.

“Estar en la ruta significa algo. Si vienen transportes, decir: ‘Che, mirá, sumate, da la vuelta y aguantá un día’. Eso es persuadir a los que tienen actividad económica. Pero no a los vehículos particulares”, dijo Eduardo Buzzi sobre la adhesión de la Federación Agraria a los piquetes ruteros. “Adherimos. Estamos de acuerdo con los reclamos de los trabajadores que se manifestarán mañana”, dijo el presidente de la Sociedad Rural, Miguel Etchevehere, y socio de los federados en la patronal Mesa de Enlace agropecuaria.

“Si el Gobierno no tomó nota de la multitud que hubo pacíficamente en todo el país el 8 de noviembre y si no toma registro de esto, indudablemente, estamos con una Presidenta que es lo que sospechan todos va para adelante, no le importa nada y hace lo que ella quiere”, sostuvo Luis Barrionueno, que decidió plegar a los gremios de su propia CGT Azul y Blanca al paro de hoy. El gastronómico advirtió que si Cristina Kirchner no da “respuesta” a los reclamos del sindicalismo opositor se “tendrá que venir un paro de 36 horas con movilización”.

En tanto, el secretario general de la CGT oficial, Antonio Caló, ratificó que no adherirá al paro. “Algunos compañeros interpretaron que se había roto el diálogo (con el Gobierno) y otros creímos que el diálogo seguía existiendo; son cosas que pasan en la vida política y en la vida sindical también”, dijo el metalúrgico para marcar diferencias con quienes convocan al paro, a los que definió como “algunas organizaciones sindicales y algunos sectores de la vida económica del país”.


Cruces por un bono

El Banco Central desmintió ayer a través de un comunicado que los miembros de su directorio perciban un ingreso adicional en forma de un bono complementario de sus sueldos. La entidad monetaria salió de esta forma al cruce de declaraciones que formuló el secretario de la CGT disidente, Hugo Moyano. El ente precisó que “en 1998 el directorio del BCRA instituyó un bono anual para el personal del organismo, que no incluye a los miembros del directorio, y que está estrechamente vinculado con la evaluación del desempeño laboral y profesional de cada agente”. Asimismo, agrega que “el bono correspondiente al presente año aún no ha sido asignado en ninguna categoría. Por lo tanto, son falsos los montos mencionados por Moyano”. El camionero había dicho que el Central pagará “bonos de fin de año” a sus empleados, que irían desde los 200.000 pesos para los miembros del directorio hasta 16.000 pesos para un asistente de ordenanza.

Compartir: 

Twitter

Pablo Micheli y Hugo Moyano realizarán hoy su protesta con varios reclamos al Gobierno.
Imagen: DyN
 
EL PAíS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.