EL PAíS › EL GOBIERNO PORTEñO NO AVANZó CON LAS OBRAS PARA PREVENIR NUEVAS INUNDACIONES

A merced de las inclemencias del tiempo

Un informe del observatorio La Fábrica detalla que la gestión macrista no tomó decisiones de planificación urbana ni mejoró la infraestructura para evitar lo que ocurrió hace un año. Advierte también que no se dio respuesta a los damnificados de entonces.

 Por Werner Pertot

Pasó un año de las inundaciones que dejaron ocho muertos en la Ciudad de Buenos Aires y el gobierno porteño hizo poco y nada para avanzar en las obras para remediar este problema. Así lo afirma un informe de La Fábrica porteña, que analiza la política de vivienda, medioambiente y transporte en la gestión PRO en 2013. El trabajo del observatorio que conduce Carlos Tomada se basa en un análisis presupuestario de los números oficiales del gobierno porteño. “A un año de las inundaciones, vemos que no se han atendido satisfactoriamente los reclamos de los damnificados, no ha mejorado la infraestructura y tampoco se han tomado decisiones de planificación urbana. En definitiva, un Estado que sigue ausente y deja a los porteños en manos de la naturaleza”, consideró Matías Barroetaveña, coordinador de La Fábrica porteña.

El informe no se anda con vueltas sobre la situación actual: “En 2013 no hubo avances suficientes para pensar que las próximas tormentas con características similares vayan a tener un impacto menor”, indica. “Al observar los avances en las obras de infraestructura previstas para el Plan Hidráulico de la Ciudad vemos que en 2013 sólo se dieron pequeños pasos al respecto de las acciones que deben emprenderse sobre los arroyos Vega y Maldonado, sin desarrollarse ninguna acción para los otros arroyos que atraviesan el sur de la Ciudad”, señala.

Concretamente, la licitación del Arroyo Vega fue adjudicada a la empresa Tecma SA por 21 millones de pesos y, en febrero de este año, las empresas Altote SA y Naku Construcciones ganaron la licitación de la captación de la red pluvial de los arroyos Vega y Maldonado.

Por otra parte, el gobierno porteño tiene en su presupuesto de este año un aumento exponencial de los programas de gestión de riesgo hídrico (1928 por ciento más) y de infraestructura de red pluvial (118 por ciento más). Habrá que evaluar si ese presupuesto se ejecuta, dado que los datos anteriores no son auspiciosos: un análisis de la Asociación de Presupuesto y Administración Pública (ASAP) señalaba que en 2013 sólo se usó el 22,4 por ciento del presupuesto para infraestructura pluvial. Según un informe de la comunera Julieta Costa Díaz, la situación fue similar en los años previos: 20 por ciento de ejecución en 2012 y 35 por ciento en 2013.

- Basura: En el informe, los economistas de La Fábrica advierten que mientras que el Ente Estatal de Higiene Urbana mantuvo su costo estable desde 2008, el presupuesto para las empresas privadas crece año a año y cada vez implica un porcentaje mayor del la partida. Hoy representa el 7 por ciento del total. Las metas de la Ley de Basura Cero indicaban que para 2010 la ciudad tendría que haber enterrado 1.048.359 toneladas de basura y se enterraron 2.110.122 toneladas. En 2012 deberían haber sido 748.828 y fueron 2.153.777. El gobierno porteño se comprometió con el bonaerense, que hará una reducción drástica –del 78 por ciento, tomando una base de 6000 toneladas– para julio de este año. El informe de La Fábrica detalla que la inauguración de dos plantas (en especial, la que recibe escombros y restos de obras) contribuyó a una reducción de la basura, pero “no está claro a qué otras estrategias apelará el gobierno porteño para reducir 2470 toneladas diarias en pocos meses”.

- Vivienda: El informe de La Fábrica porteña advierte que para las villas no hay “mayores programas de intervención que no refieran a paliativos circunstanciales”. El programa de urbanización de villas (PRIT) no tuvo presupuesto el año pasado. Sí lo tuvieron la Unidad de Gestión e Intervención Social en Villas (UGIS), que se dedica a atender la emergencia, y el programa de Mejoramiento en Villas. En 2013, la UGIS recibió un 31 por ciento más de presupuesto contra un 4,4 del programa de Mejoramiento en Villas. Durante 2013, el dinero para las villas sufrió una serie de recortes. El más llamativo fue el que derivó fondos para un programa que se ocupa de hacer desfiles de modelos –tal como informó Página/12– o para reacondicionar la entrada del zoológico de Palermo. En el informe actual de La Fábrica porteña identificaron otro recorte: se le quitaron fondos al programa de Rehabilitación de La Boca (un 20,2 por ciento), al de Mejor Vivir (un 37 por ciento) y al de Integración de Personas con Discapacidad (Copidis), al que se le recortó un 46,5 por ciento. ¿Adónde fue el dinero? A cubrir gastos de eventos para las empresas del Distrito Tecnológico y del aniversario de Parque Patricios.

El informe advierte que la principal política habitacional del gobierno porteño son los créditos hipotecarios del Banco Ciudad: dos para familias más vulnerables (ley 341, Primera Casa), al que se suma Mi Casa BA. La Defensoría del Pueblo logró sistematizar la cantidad de créditos otorgados en los dos primeros programas, que viene en franco descenso hacia 2013: en 2004 eran 660 créditos, en 2012 fueron 99 y el año pasado se aprobaron sólo cuarenta. El programa Primera Casa, que fue lanzado con toda pompa en 2012, se proponía otorgar cerca de cuatro mil créditos y otorgó 508. “De las 200 mil solicitudes, sólo se aprobaron el 0,25 por ciento”, indican.

- Transporte: La política hacia el subte, recuerda el informe, se caracterizó por “una merma de usuarios en un contexto de una suba exponencial de la tarifa”. En 2012 cayó por primera vez un 23,8 por ciento (130 mil usuarios). El informe advierte que la tarifa técnica –que la gestión PRO fijó en 7,47 pesos– partió de tomar los gastos que informó Metrovías, sin mayores revisiones, y dividirlos por la cantidad promedio de pasajeros. Los economistas de La Fábrica advierten que con el último aumento a 4,50 “los usuarios absorben prácticamente la totalidad de los costos operativos del sistema”. También señalaron que en abono social “incluye numerosas restricciones”.

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Las inundaciones del año pasado en la Ciudad de Buenos Aires dejaron ocho muertos.
Imagen: Télam
 
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