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Dos antiguos secretarios del ex ministro de Justicia Raúl Granillo Ocampo se enfrentarán en un careo ante el fiscal Guillermo Montenegro, que tiene a cargo la investigación de los sobresueldos en el menemismo. Uno de esos testigos, Roberto Martínez Medina, asegura que su ex jefe cobró 50 mil pesos por mes como plus en negro durante más de dos años. Su contrincante, Graciela Ponte de Lanza, que sigue asistiendo al riojano, dice que no tuvo ni noticia de esos pagos. Ahora van a tener que limar sus diferencias.
El revuelo por los sobres en negro estalló durante el juicio por enriquecimiento ilícito contra María Julia Alsogaray. Fue el día que se presentó a declarar Martínez Medina y dijo que cuando era secretario privado de Granillo Ocampo en Justicia el ex ministro lo mandaba todos los meses a buscar un sobre con 50 mil pesos en efectivo a la Jefatura de Gabinete, donde se encontraba con asistentes de otros ex funcionarios que iban con el mismo fin.
Aquel relato motivó la apertura de una causa penal en el juzgado de Jorge Ballestero, que fue delegada a la fiscalía de Montenegro. Mientras comenzaba a avanzar esa pesquisa, en el juicio de Alsogaray varios ex funcionarios confesaban, igual que ella, haber cobrado o conocer los sobresueldos. Uno de ellos fue el propio ex titular de la DGI Ricardo Cossio. El Tribunal Oral 4 que terminó condenándola por enriquecimiento ilícito dio por probada, por primera vez, la existencia de “un sistema” de pago de “sobreasignaciones” que calificó como “ilegal” y “perverso”. Esta sentencia dejó sentadas las bases para que la nueva investigación analice las responsabilidades de los funcionarios que administraban fondos públicos y les daban un uso ilegítimo.
Así las cosas, el expediente que comanda Montenegro podría involucrar no sólo a Granillo Ocampo sino a buena parte del gabinete de Carlos Menem y a otros personajes de alta jerarquía, incluso al mismo ex presidente. Pero todavía faltan pruebas y tiempo para llegar a eso. El careo entre Martínez Medina y Ponte de Lanza apunta a ir despejando el camino. Ambos declararon en las audiencias de María Julia y en la causa específica de sobresueldos. Las dos veces dieron versiones contrapuestas.
Ponte de Lanza, que dijo seguir colaborando con Granillo Ocampo, sostuvo que no sabía que su patrón cobrara el plus en cuestión. Martínez Medina, además de dar detalles sobre el cobro de los extras sin recibo, señaló que con esa plata el ex ministro compró, entre otras cosas, costosos departamentos para sus tres hijos y que la secretaria era la encargada de ir a pagar. De acuerdo con la versión de ella, las propiedades fueron adquiridas con créditos hipotecarios.