Algunos creen que a lo mejor no siempre el beneficio de las empresas fue en términos de costos. Hay intentos de mirar otros indicadores: el disciplinamiento, por ejemplo. ¿Los números podrían mostrar estas otras variables?

König: –No necesariamente en todos los casos se va a constatar que el costo laboral bajó abruptamente durante la represión. Eso se va a evaluar en cada caso. Nosotros hacemos el análisis lo más desagregado posible. Pero qué pasa: nosotros analizamos el costo laboral, las cuentas de salarios; esto puede agrupar a todos los asalariados y puede ser que lo que notemos es que haya habido una distribución desigual del incremento salarial. Puede ser que hayan empezado a pagar mucho más a altos cargos, por ejemplo, y mucho menos a los cargos más bajos. Entonces lo que pudo lograr la represión ilegal fue una distribución más desigual del ingreso al interior de cada empresa, y esto no se va a poder ver en el balance de la empresa. Para hacer el análisis se necesita el salario de cada uno y no en todos los casos los tenemos. En La Nueva Provincia vimos eso: una distribución más desigual a lo largo del período. Entonces, la cuestión del disciplinamiento puede ser que no se vea reflejada directamente, porque no lo permite el nivel del balance, pero en algún lado de la información contable está. Hace falta una mirada exhaustiva.

König: –La relación de muchas empresas con la dictadura se ve por ejemplo en relación con el crédito externo. No era que cualquier empresa podía obtener un crédito en el exterior, sino aquellas que estaban más vinculadas con el gobierno. Se ve el beneficio que se obtiene desde varios ángulos. Pero sí, las actas de asambleas son elocuentes, también las memorias de los balances. Los empresarios explican cuál es la evolución, las perspectivas. A la hora de mostrar la rentabilidad económica que se obtenía, son muy transparentes, porque no pensaban que iba a existir esta mirada. Entonces son empresas que se exponen. Así que son lecturas que nos debemos. Todo eso está ahí: está para que lo leamos todos.