Los rumores sobre el supuesto alejamiento de Sandra Mendoza de su cargo como ministra de Salud de Chaco circularon tanto ayer que hasta se mencionó (o se propuso, según cómo se vea) un posible reemplazante: Hugo Sager, bioquímico de profesión y actual intendente de la localidad de Puerto Tirol. “Todo sigue bien hasta ahora”, dijo al respecto el esposo de la ministra, el gobernador Jorge Capitanich. La supuesta renuncia habría sido deslizada por funcionarios y voceros de su gobierno. “El día que los medios de comunicación, que están en su legítimo derecho de efectuar especulaciones, pretendan cambiar funcionarios de mi gabinete, entonces el poder decisorio quedará en otras manos”, sentenció Capitanich.

Para despejar las dudas, el matrimonio chaqueño apareció ayer durante una reunión en la que se anunció el lanzamiento del Día Provincial de la Lucha Contra el Dengue y de la que participaron intendentes, funcionarios, legisladores, organizaciones, instituciones y fuerzas de seguridad. El día elegido sería el 6 de mayo. Durante esa jornada se realizarán las acciones finales de descacharrado y fumigación tanto individual como espacial. Capitanich aseguró que la del dengue “es una lucha entre todos contra el vector” transmisor, el mosquito Aedes aegypti, y destacó que “es un tema que excede al área de salud”.

Cuando le preguntaron sobre la supuesta renuncia de Mendoza, Capitanich contestó tajante: “Cuando hagamos los cambios de gabinete los voy a anunciar yo y voy a firmar los decretos”. Mañana Sandra Mendoza deberá concurrir a la Legislatura local para explicar y defender las acciones que implementó su ministerio en la prevención del dengue. En esa provincia, según datos oficiales, hubo 9421 casos. Fue esta interpelación uno de los disparadores del rumor periodístico que primero indicaba que renunciaría antes de esa cita y luego que lo haría después.

Los voceros consultados por Página/12 desmintieron la supuesta partida de Mendoza, aunque uno de ellos se sinceró sobre el peso que podría tener la interpelación: “Faltan dos días todavía y en política dos días son una eternidad”.