espectaculos

Miércoles, 12 de septiembre de 2012

CINE › MAñANA COMIENZA UNA NUEVA EDICIóN DEL FESTIVAL DE CINE ALEMáN

No perder de vista un cine pujante

Es el mejor modo de corregir “distorsiones” de una plaza cinematográfica dominada por las lógicas de mercado: hasta el próximo miércoles, el Village Recoleta exhibirá trece largometrajes que demuestran los diferentes lenguajes del cine germano.

 Por Oscar Ranzani

Si se tienen en cuenta la recesión que salpica a Europa por esta época y las informaciones que llegan sobre los recortes que el gobierno español de Mariano Rajoy está realizando al fomento del cine ibérico, puede asegurarse que la producción cinematográfica en algunos países del Viejo Continente, como España, está en franco descenso. No es el caso de Alemania, uno de los pocos países de la región que se ha visto afectado por la recesión en menor medida que el resto, producto de su poderío económico. Mucho de este material podrá verse en el 12º Festival de Cine Alemán, que se desarrollará desde mañana y hasta el miércoles 19 en el Village Recoleta (Junín y Vicente López). La programación se compone de trece largometrajes de la más reciente usina del país gobernado por Angela Merkel. Gustav Wilhelmi, responsable de German Films en la Argentina –empresa organizadora de la muestra–, sostiene que este festival “es una manera de estar presente y mostrar que el cine alemán sigue vital, con una producción sumamente interesante”. Pero lamentablemente, sostiene Wilhelmi, “por circunstancias que están más alejadas del cine alemán y más cercanas al mercado nacional, cada vez se está viendo menos cine de todo el mundo, no sólo el alemán, excepto el estadounidense”.

Para la apertura se programó Felicidad, el último largometraje de Doris Dörrie, cuya proyección contará con la presencia del protagonista del film Vinzenz Kiefer. La historia presenta la relación que entablan una joven refugiada de guerra que se dedica a la prostitución con un muchacho punk que no tiene hogar y que construyen una relación sentimental. Un día, un cliente de Irina muere en su casa, y ella no tiene mejor idea que salir corriendo. Cuando su novio llega y se topa con el cadáver, buscará ayudar a su pareja y a que nada ni nadie destruya lo que juntos cimentaron.

Uno de los films más resonantes es El amigo alemán, regreso a la dirección de la argentina radicada en Alemania Jeanine Meerapfel, quien estará presente. Situada en la Buenos Aires de los ’50, la historia une casi accidentalmente a Sulamit, una chica que es hija de inmigrantes judío-alemanes con Friedrich, hijo de un miembro de la SS, que cuando descubre el pasado de su padre decide viajar a Alemania... y Sulamit lo sigue. La historia atraviesa cuarenta años entre Europa y la Argentina, a lo largo de los cuales experimentarán distintas realidades que van desde el Mayo Francés del ’68 a la dictadura argentina.

La violencia y el drama que ocasionan los neonazis y sus influencias en la juventud alemana es el tema que aborda La guerrera, de David Wnendt. La protagonista es la veinteañera Marisa, quien al sentirse hastiada de la vida que lleva en una familia que no quiere y sin proyecto a largo plazo como cajera de supermercado, les echa la culpa de todos los males a “los judíos, los extranjeros, la policía y los izquierdistas”. Con semejante percepción de la sociedad es “entendible” que pertenezca a un grupo neonazi, donde puede idolatrar al terror de Hitler. Cuando una adolescente se incorpora a su grupo, Marisa es la encargada del adoctrinamiento. Justo en ese momento conoce a un refugiado afgano que le despertará más de un planteo a su manera de pensar. Tal vez sea demasiado tarde.

Personajes en situaciones extremas abundan en El perdón, de Matthias Glasner. Es que la familia de Maria y Niels y su hijo Markus toma una decisión que marcará sus vidas: mudarse a un terreno inhóspito de Noruega, donde el sol sólo se ve la mitad del año. No la tendrán fácil en ese territorio, porque todos deberán enfrentar la culpa: el padre por tener una amante, la madre por atropellar a una joven y el hijo por acosar a uno de sus compañeros en la escuela. Compleja también es La suma de todas mis partes, de Hans Weingartner, que enfoca en la vida de un joven que sale de un neuropsiquiátrico, y sin lugar fijo donde vivir ni familia con la cual convivir, se topa con un niño en situación de calle con quien entablará amistad. Seres con ternura también tiene Niños prodigio, de Marcus Rosenmüller: en el contexto del pacto de no agresión que Hitler y Stalin firmaron en 1941, la historia sucede en la ciudad ucraniana de Poltava, prácticamente al margen de la Guerra. Allí, dos niños judíos y una chica alemana deslumbran al pueblo con sus habilidades: Abrascha y Hanna los deleitan tocando el violín, mientras que el tercero deslumbra acariciando el piano. Todos tienen sueños de triunfar en Nueva York, pero cuando Alemania y Rusia entran en guerra, sus ideas pronto comienzan a diluirse.

El cierre será, como en otras ocasiones, con una película muda que contará con musicalización en vivo de Marcelo Katz y Locos por el Celuloide (este evento cuenta con la colaboración del Goethe Institut). El elegido es el clásico de Friedrich Zelnik, Los tejedores: es 1840 y un grupo de trabajadores tiene jornadas exigentes con sueldos que no alcanzan para nada. El dueño decide reducir aun más el salario por la competencia que implican los telares mecánicos, pero los tejedores resisten y toman la vivienda del fabricante. El movimiento de rebelión pronto se incrementa cuando se suman trabajadores de pueblos vecinos.

* Programación y horarios en www.cinealeman.com.ar

Compartir: 

Twitter

La apertura será con Felicidad, el más reciente largometraje de la realizadora Doris Dörrie.
 
CULTURA Y ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.