espectaculos

Jueves, 5 de octubre de 2006

CINE › “OPEN SEASON: AMIGOS SALVAJES”, DE LA SONY ANIMATION

Una galería de clones mal terminados

 Por H. B.

Madagascar, Vida salvaje, Vecinos invasores, Amigos salvajes. Dentro de unos meses, nadie va a poder acordarse exactamente de cuál era cuál. La de los animales salvajes que viven domesticados. ¿Cuál, Madagascar? No, Amigos salvajes. La de la fiera a la que, de tan habituada como está a las comodidades de la vida urbana, ni el rugido le sale. Ah, el león de Vida salvaje. No, el oso de Amigos salvajes. La de las bestias feroces que mueren por la comida chatarra. Esa es Vecinos invasores, con seguridad. Perdió: es Amigos salvajes. La de los animalejos digitalizados, que cada vez se parecen más a muñecos de peluche. ¿Madagascar, Vida salvaje, Vecinos invasores, Amigos salvajes? Todas ellas, por supuesto.

Aunque en razón del salvaje –con perdón de la palabra– proceso de autoimitación la distinción parece tener cada vez menos sentido (diez ositos de peluche al que pueda diferenciar las producciones Disney de las de Dreamworks, y las de Dreamworks de las de Fox), para la estadística habrá que apuntar que Open Season: amigos salvajes es la primera producción de Sony Animation, nueva división de animación de la compañía que edita a Ricky Martin. Para la estadística también deberá decirse que el protagonista es Boog, oso grizzly que la pasa perfecto viviendo en el garaje de su dueña, la guardabosques Beth. Que, desde que lo rescató siendo un cachorro, Beth ama a Boog, y no quiere saber nada con devolverlo a la vida salvaje (se añoran tanto la versión freudiana de Open Season como su variante porno). Pero el sheriff del lugar convence a Beth de que su hijo (perdón, su oso) ya está lo suficientemente grandecito como para arreglárselas solo. Por lo cual la guardabosques de Beth termina dejándolo en medio de la montaña, una noche de luna... justo en el momento en que la temporada de caza está por comenzar. Y el gatillo fácil de Shaw anda por las inmediaciones, fusil en mano y buscando cobrarse venganza del oso asqueroso que le arrebató al venado Elliot. Que no es otro que Boog, por supuesto.

Con personajes que parecen una galería de clones mal terminados de otros ya conocidos (el grandote tierno Boog, un clon del Sulley de Monsters; el chistoso Elliot, del burro de Shrek; el machista Shaw, de Gastón en La Bella y la Bestia, y la posesiva Beth, de Yocasta, claro está) y una estructura narrativa que, ante la falta de un verdadero nudo dramático, se contenta con “ir pateando la pelota para adelante”, Open Season no es una más de la ya excesiva serie de animalitos doméstico-salvajes. Es una menos.

5-OPEN SEASON: AMIGOS SALVAJES

Open Season, EE.UU., 2006.

Dirección: Roger Allers y Jill Culton.

Guión: Steve Bencich, Ron Friedman y Nat Mauldin.

Compartir: 

Twitter

 
CULTURA Y ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.