La serie La Argentina según Perón es otra cara del proyecto de una película (en producción) de Blas Eloy Martínez y su esposa, socia en la productora Micromundos y también cineasta, Cecilia Priego: “Vengo escuchando estas grabaciones desde muy chico... Hace unos años, un poco por la coyuntura nacional, le dije a mi viejo que me parecía que era un buen momento, o por lo menos yo lo necesitaba, para hacer algo con esas grabaciones”.

Blas, hijo de Tomás, cineasta y guionista, nació dos años después del encuentro de Puerta de Hierro y naturalmente creció con estas cintas como banda de sonido, mientras su padre realizaba aquel “trabajo minucioso” de intentar descifrar a una figura tan compleja como fundamental, construyendo un mundo a partir de lo dicho y lo no dicho. Cuando empezó a encarar esas cintas con pasión y cierta obsesión, y comenzaron a surgirle preguntas no solamente sobre lo que Perón expresaba sino sobre la naturaleza misma del encuentro: “¿Qué pasó puntualmente en esos cuatro días? ¿Por qué mi viejo se había obsesionado tanto con Perón al punto de dedicarle más tiempo a Perón que a sus propios hijos? No lo digo en forma de reproche sino de interés. A partir de ese encuentro se obsesiona con Perón, y el resto de su vida se dedica a desentrañar el misterio peronista”, explica Blas, que tuvo un acercamiento precoz al General y a algunas situaciones derivadas de la complejidad política de la época: “A los dos años y medio me pusieron un revólver en la cabeza y le dijeron a mi hermana mayor: ‘Tu viejo se tiene que ir en 48 horas porque si no los matamos a todos ustedes’. Mi siguiente imagen es durmiendo en un cuarto de hotel en Venezuela, con mis viejos, con colchones tirados en el piso, con mi hermano, y las postales del exilio... Creo que Perón debe haber ido y venido una y otra vez en todas esas experiencias de la vida cotidiana”.

Como un producto derivado y diferente de ese documental que anticipa un punto de vista más subjetivo y personal –también político–, surgió la idea de hacer una serie de ocho capítulos trabajada junto con Habitación 1520 y Canal Encuentro. El resultado es La Argentina según Perón, en donde el audio está editado en función de ocho ejes que apuntan a una especie de manual personalísimo sobre cómo hacer política en Argentina. La serie recorre distintas temáticas, desde la infancia hasta “el arte” del conductor o la construcción de Eva (“Eva fue un producto mío”, se lo escucha decir al General en el capítulo 2). En todos los casos, se observa un grado de distancia de un Perón estratégico, monumental, que habla de la Argentina desde el exilio, interrumpido en diversas oportunidades por López Rega y guiado por un entrevistador preciso que hace del silencio su principal estrategia.

Blas habló y discutió mucho con Tomás sobre Perón, pero no tanto de estas grabaciones en particular. Cecilia se entusiasma al pensar qué le preguntaría hoy: “Después de todo este proceso y todas las conversaciones que tuve como nuera de Tomás, lo que le preguntaría es: ¡¿Por qué no te volviste peronista?!”, a lo que Blas contesta con posibles respuestas de su papá, que concluyen en una característica: “A mí me parece que el peronismo en general tiene una fuerte historia de militancia y de compromiso. Mi viejo no fue un tipo que uno pueda decir que era militante. Y si bien tuvo su gran cuota de compromiso, no era el de un militante, sino el de un intelectual. Me parece que su naturaleza no peronista tiene relación con su necesidad de mantenerse ajeno al compromiso con un partido o movimiento, aunque fuertemente ligado a la realidad de su país. Era un tipo al que sobre todo le preocupaba muchísimo tener la distancia para poder hacer el análisis que él creía más objetivo y racional. Mi viejo, ante todo, era escritor y periodista. El tenía un compromiso muy fuerte con eso, y no iba a hacer nada que lo pusiera en juego”.

La Argentina según Perón se estrena este miércoles a las 23 y repite viernes a la 1.30 y sábado a las 20 por Canal Encuentro.