Desde la semana pasada, en la página web de la provincia de Santa Fe, se puede consultar el Registro de Objetores de Conciencia. Allí se indica quiénes son los profesionales y agentes del sistema de salud pública que se niegan a realizar prácticas como abortos no punibles, ligadura tubaria, vasectomia, anticoncepción quirúrgica; a recetar anticoncepción de emergencia o anticonceptivos orales. El número de objetores es exiguo -136-, si se tiene en cuenta los 10 mil agentes que trabajan en las áreas afectadas a estos servicios. En realidad, la provincia aceptó el 39 por ciento de las objeciones presentadas, que sumaron poco menos de 400. "A la persona que hace una objeción de conciencia, el Estado la está eximiendo de cumplir con la ley. Las razones y los motivos que se esgrimen deben ser extremadamente claros y no dejar lugar a dudas", puntualizó Daniel Teppaz, director provincial de Políticas de Géneros e Interculturalidad. Por eso, casi el 60 por ciento de las objeciones fueron rechazadas por falta de argumentos válidos o por confusiones científicas.

Santa Fe es la primera provincia del país que cuenta con un registro público de objetores. En todo el mundo, sólo existe en Connecticut, Estados Unidos, un registro similar. En mayo, la provincia lanzará oficialmente este Registro, que ya puede consultarse en www.santafe.gov.ar. Allí, para que sea más fácil, se puede poner "objetores" en el buscador, y se llega al Registro.

La ley provincial 11.888, de salud sexual y reproductiva, sancionada en mayo de 2001 establece que los profesionales tienen derecho a formular su objeción de conciencia pero también que "el estado provincial garantiza la accesibilidad y gratuidad de las prestaciones".

Desde 2010, a partir de su propuesta en el Consejo Asesor de Salud Sexual y Reproductiva, la provincia trabajó en la creación del Registro Público. "Por la ley, se pide un registro de objetores, pero no que sea público. De ese modo, se hace un listado que sólo sirve al estado, pero la población no tiene acceso. Con su publicación, se pone el acento en respetar los derechos de las y los que quieran consultar", explicó Teppaz.

Y de eso se trata. De impedir que los objetores obstaculicen el ejercicio de los derechos. "Ante una consulta y/o demanda de salud sexual y reproductiva, estos profesionales tienen el deber de brindar información suficiente, para que puedan acceder a las prácticas que necesite cada usuaria/o, refiriéndola a otro/a profesional del equipo de salud, y no tratar de imponer las creencias por las que han optado ser Objetores de Conciencia", indica con claridad la página de la provincia. Allí también se subraya: "Todos los Hospitales o Centro de Salud de la Provincia de Santa Fe deben dar respuesta adecuada a la demanda, ya sea brindando información efectiva o facilitando la realización de la práctica que necesite".

Al mismo tiempo, la provincia indica a la ciudadanía que "la publicación de este listado permite reorganizar los servicios de salud, para asegurar que se garantice el derecho a la salud".

Desde el mes próximo, el registro también estará visible en los hospitales y centros de salud, en forma de afiches, con los nombres de todos los profesionales y agentes objetores. "Prácticas de salud sexual. Tenés derecho a recibir información, que te receten métodos anticonceptivos orales, inyectables, para la lactancia o de emergencia. Tenés derecho a realizarte ligaduras tubarias, vasectomias o abortos permitidos por la ley", dice el afiche.

El Registro "es una herramienta importante porque al estar en la web, las mujeres saben que las personas que figuran ahí no pueden hacer esas prácticas en otro lado, ni en el sector público ni en el privado". Después de dos años de trabajar el tema, Teppaz carece de ingenuidad. "La cuestión más importante es que nosotros tenemos gente que no ha hecho la objeción de conciencia pero en definitiva las cuestiones culturales operan en el consultorio. Advertimos en la página web que si alguien que no esté en ese listado, cuando la mujer va a la consulta, dirime alguna razón de conciencia o intenta que cambie de parecer en razón de sus cuestiones religiosas o morales, incurre en incumplimiento de sus deberes de funcionario público", enfatizó.

Las personas usuarias del sistema público de salud que encuentren obstáculos pueden denunciarlo ante la dirección de hospitales y centros de salud, y si no reciben respuesta, pueden escribir a [email protected], llamar al 0342 4572507 o también al 0800 222 3444, del Ministerio de Salud de la Nación.