Martín Cardozo, de 27 años; y Karen Trejo, de 20; fueron imputados ayer por el brutal crimen del remisero de Villa Gobernador Gálvez, Horacio Colberg, quien falleció anteayer, tras recibir un disparo en la cabeza, en José Ingenieros y San Luis, de esa localidad. El juez Héctor Núñez Cartelle ordenó la prisión preventiva sin plazo, de ambos. Gonzalo, hijastro de la víctima, aseguró a Rosario/12 que "ellos son los asesinos. Nos cierra todo porque mi padrastro la conocía a ella, que era clienta habitual de varias remiserías y había llamado otras veces a la agencia. Lo mató porque quiso callarlo", después de robarle. "Ella sabía que mi papá la iba a denunciar", dijo. El fiscal Florentino Malaponte evidenció que el auto del remisero fue encontrado en la esquina de la vivienda de los imputados; a la mujer se le encontró un celular con la misma quebradura que el de la víctima; y cuando llamó a la remisería dio la dirección donde viven pero alteró un número y dio un domicilio inexistente. Además, en el allanamiento se secuestraron armas y municiones, por lo que Malaponte envió copias a la Justicia Federal, ante el posible delito de acopio de armas.

En Tribunales también se movilizaron allegados a Franco Monzón, atropellado en el piquete que pedía justicia por Horacio, el viernes pasado, en San Martín y Circunvalación. "Lo arrastró 20 metros como un perro", dijeron testigos.

Malaponte acusó a la chica de "haber pedido, por teléfono, un remis a la agencia El Rey, a la 1.02 de la madrugada del viernes, para que la llevara de Ayacucho 6173 (alteró el 3 por el 5 de su verdadero domicilio) hasta José Ingenieros y San Luis de Villa Gobernador Gálvez". En el llamado, Karen dijo llamarse Romina. Horacio estaba cerca de allí y desde la central lo mandaron a buscar a la pasajera. Al llegar, "la mujer subió al auto con su novio --quien tiene antecedentes por abuso de armas--. Antes de arribar a destino uno de ellos le disparó desde atrás en la cabeza, para luego robar el auto y dejar al hombre tirado en la calle", dijo Malaponte, quien más tarde indicó que Karen se sentó adelante, según la declaración de un testigo que los vio pasar en el auto. Les imputó "homicidio en ocasión de robo agravado por el uso de arma y tenencia de arma", cuya pena mínima es de 13 años y medio.

Tras el hecho, Gonzalo llegó a asistir a su padre y éste quedó internado en el Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, hasta el domingo, cuando falleció en horas de la tarde. "Para mí estaban pasados, no estaban en sus cabales; se les fue todo de las manos, porque después dejaron el auto en la esquina de su casa", dijo Gonzalo, quien además señaló que la joven estaba vinculada con el narcotráfico, ya que la conocen por vivir cerca. Y agregó: "Si mi viejo fuera traficante, como dicen algunos audios que andan dando vueltas, no estaría trabajando todas las noches por ciento cincuenta pesos. Con eso comíamos todos, incluso mi hija que vive con nosotros", dijo el muchacho. "A mi viejo lo quisieron callar ejecutándolo por la espalda, ése es el móvil del crimen", aseguró. Su hermano, Miguel, agregó: "Yo conocía a esta chica porque sus tíos viven enfrente de mi casa. A veces me pedía un viaje acá, o allá, yo trabajaba en el turno mañana y mi papá en el turno noche", dijo. Según sus sospechas, la pareja decidió ejecutar a Horacio cuando advirtieron que los reconocería si le robaban. "No es justo que traten a mi papá de narcotraficante, no respetan el duelo. La gente del mismo partido está tratando dejar bien parado al intendente (de Villa Gobernador Gálvez, Alberto Ricci) que no le brinda seguridad a nadie", denunció la familia.

En tanto, ayer por la mañana familiares y compañeros de trabajo de Horacio cortaron los ingresos a V.G.G., pero los piquetes fueron levantados a las 9 de la mañana. Desde allí, se trasladaron a Tribunales, donde además llegaron familiares del joven atropellado en el corte que pedía justicia por Horacio, el viernes pasado. Franco Monzón, de 19 años, a quien apodaban "Chino", también murió el domingo tras ser embestido por una camioneta que no respetó el corte de calle, en Circunvalación y San Martín. "Nosotros vimos cómo iba enganchado abajo de la camioneta blanca y su cuerpo daba contra el pavimento. Lo arrastró como 20 metros, a toda velocidad, como si fuera un perro", dijeron los testigos, hijos del remisero, que vieron a un hombre que conducía con una mujer al lado y otra personas en la parte de atrás. Desde el Ministerio Público de la Acusación señalaron que se mando peritar las cámaras del lugar y citaron a testigos.

Temprano, el intendente Ricci dijo a LT8: "El delito callejero bajó a un 50 por ciento desde que nos hicimos cargo, pero igual hay demasiados delitos. Le pido al ministro (Maximiliano Pullaro) que empecemos trabajar de manera continua, y no porque se nos de un hecho manden a toda la fuerza".