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Lunes, 8 de marzo de 2010

CIUDAD › OPINIÓN

Desigualdades vigentes, derechos que falta conquistar

 Por Marta Fassino*

Si bien ha habido un avance en el reconocimiento de los derechos de las mujeres, las políticas neoliberales aplicadas durante los últimos años condujeron en nuestro país al desempleo masivo, la concentración de la riqueza, retirada del estado y aumentos dramáticos de la pobreza, la marginación y la exclusión social. Esto afectó particularmente a las mujeres al sumársele el funcionamiento desigual del sistema de género. Y nada indica que en la actualidad, las políticas públicas argentinas se estén delineando para achicar las desigualdades, resolver la fragilidad de nuestra economía y/o superación de la crisis. Tampoco se perfilan cambios que incorporen una perspectiva de género transversal para corregir las diferencias entre varones y mujeres.

1 Trabajo: el mercado del trabajo está ocupado en un 50 por ciento por mujeres (mayoritariamente madres) de las cuales el 40 están "informalizadas" y un 70 por ciento en cargos de menor calificación. Asimismo, las mujeres ganan -en promedio un 30 por ciento menos que los varones en igualdad de puestos. Y a esto se suma la "desventaja de la maternidad" (no protegida socialmente) que aumenta el trabajo femenino sumando la dedicación al hogar, cuidado de los hijos y personas mayores y/o enfermas y disminuyendo la calidad de vida.

2 Siguen aumentando los hechos de violencia de los cuales las mujeres somos las principales víctimas. En nuestro país, solo en 2009 hubo 231 feminicidios. El feminicidio es el asesinato cometido por un hombre hacia una mujer a quien considera de su propiedad (mal llamado crimen pasional). El término es político y responde a la naturalización de la sociedad hacia la violencia sexista.

3 Las mujeres (niñas y adultas) somos víctimas a través de engaño o rapto del tráfico de personas con fines de prostitución. Se calcula que cerca de 600 mujeres son incorporadas cada año en nuestro país a las redes de prostitución nacional y/o internacional. En su mayoría son pobres, de entre 13 y 24 años). Y si bien tenemos una ley específica (sancionada en 2008) necesita urgentes modificaciones para hacerla más efectiva.

4 En cuanto a nuestra sexualidad y salud son varios los aspectos a abordar: * Prevención y asistencia a víctimas de delitos contra la integridad sexual (el 80 por ciento de las violaciones y abusos ocurren en el ámbito familiar) y no revictimización o invisibilidad;

*Derechos sexuales y reproductivos: garantías para que cada mujer pueda ejercer el derecho a procrear y decidir cuando y cuántos hijos quiere tener. Para lo que se reclaman más leyes y presupuestos. Puesta en vigencia de programas y leyes de Educación Sexual en la Educación Formal.

*Ampliación y difusión de la asistencia hospitalaria en ligaduras de trompas (y reclamo en provincias donde no existe la ley específica) y provisión de pastillas de levonorgestrel ("del día después"/ anticoncepción de emergencia).

*Abordaje de la problemática del aborto. Decenas de proyectos de leyes para despenalizar y/o legalizar el aborto quedan sin debatir y los reclamos de las mujeres sin escuchar. Mientras tanto 500.000 mujeres por año se someten a abortos "clandestinos" (son el 40 por ciento de los embarazos). Aquellas con recursos económicos lo hacen en condiciones seguras. Pero las más pobres terminan mutiladas, estériles o muertas (500 mueren por la precariedad de las intervenciones). Todas están al margen de una ley retrógrada y superada por la realidad. Y aun con la legislación actual, muchos casos de aborto no punibles no se concretan por prejuicios fundamentalistas y condenan a las mujeres a partos no buscados (productos de violaciones) o que les producen la muerte.

Las y los socialistas argentinas/os tomamos la bandera de los derechos de las mujeres, la igualdad de oportunidades y la dignificación humana y hemos incluido en nuestra agenda y trabajo partidario cada reclamo que hará a las mujeres mejores ciudadanas, a nuestro país más justo y digno, y a nuestra sociedad más democrática, igualitaria, libre y solidaria.

No seremos libres mientras una sola mujer esté bajo cualquier tipo de opresión. Como dijo Alicia Moreau: "La elevación social de la Mujer proviene de la afirmación de sus derechos basados en la igualdad de los seres humanos?".

*Secretaria de la Mujer. Partido Socialista. Federación Santa Fe

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