13:31 › EN VíSPERAS DEL PARO DE LA CTA, DE MOYANO, DE LA SOCIEDAD RURAL Y DE LA FAA

Micheli confirmó que no habrá movilización a Plaza de Mayo

El secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos disidente, acompañado por dirigentes de segunda línea de la Organización de Trabajadores Radicales, la Corriente Clasista y Combativa, Barrios de pie y el Polo Obrero, amenazó con cortar "todos los puentes y las rutas del país", aclaró que el paro de mañana es "en defensa propia", reivindicó "la unidad de acción" con la CGT Azul y Blanca del gastronómico Luis Barrionuevo.

El secretario de Seguridad, Sergio Berni, por su parte, opinó que "habrá muchos organizadores que van a generar caos" en la jornada de paro convocada mañana y aseguró que el Gobierno buscará asegurarle el transporte a los ciudadanos. "Mañana no va a haber problemas para ir a trabajar, debiera ser un día normal", consideró por su parte el senador Aníbal Fernández. En tanto, el titular de la CTA disidente, Pablo Micheli, defendió los cortes: "De lo que se trata es que quien tenga ganas de ir a trabajar, no vaya".

"Nuestra responsabilidad va estar fundamentalmente en asegurarle a los ciudadanos el transporte y que puedan trasladarse tranquilos tanto en los micros como en los trenes", sostuvo el secretario de Seguridad, Sergio Berni, en una conferencia de prensa brindada esta mañana en la sede de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal.

Allí, al ser consultado sobre la medida de fuerza convocada para mañana por la CGT de Hugo Moyano, la CTA de Pablo Micheli y la CGT Azul y Blanca de Luis Barrionuevo, el funcionario sostuvo que procurarán "garantizarle al ciudadano que quiere trabajar sus medios de transporte, la seguridad en los trenes y en las terminales de micro". "Después será responsabilidad de aquellos que quieren generar malestar, los cortes y todo lo que estoy escuchando, será su responsabilidad y quedará en la conciencia de ellos", sostuvo el funcionario. "Quieren generar el caos y pretenden una reacción nuestra que no la van a tener", agregó,

Por su parte, el senador nacional Aníbal Fernández (Frente para la Victoria) consideró que mañana la gente "no va a tener problemas para ir a trabajar" porque "son muy pocos los gremios que están llevando el paro a la práctica". El exjefe de Gabinete remarcó que el transporte no adherirá al paro, por lo que "los trenes y subtes" funcionarán con normalidad, y descartó que se realicen piquetes en las vías porque eso podría "provocar cualquier desmán". Fernández cuestionó en ese sentido al titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, por estar "amenazando a la gente con dejarla sin transporte".

En tanto, el secretario general de la CTA disidente, Pablo Micheli, justificó que se realicen piquetes durante el paro. "De lo que se trata es que quien tenga ganas de ir a trabajar, no vaya". En declaraciones radiales, dijo que, de todos modos, "el que quiere ir a trabajar a toda costa, más allá de los piquetes, siempre encuentra la manera de hacerlo y de poder resolverlo". Agregó que "tampoco los piquetes son de vida o muerte, 'no pasa nadie'. Nunca ha ocurrido. Jamás ha habido un hecho de violencia, por lo menos en los paros que hemos hecho nosotros".

El secretario general de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, insistió con que la protesta será acompañada por "gremios que, a nivel nacional, están en otro sector del movimiento obrero". Afirmó que "el reclamo es legítimo, nadie lo niega: lo comparten los que están con el Gobierno y los que no están con el Gobierno". Entre otros puntos, los gremios piden la suba del tope de Ganancias y la universalización del salario familiar.

El titular de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, por su parte, advirtió que "después tendrá que venir un paro de 36 horas si no hay respuesta, y los de 36 horas son los paros con movilización".

Según el metalúrgico Antonio Caló, los 30 gremios de distintos rubros que decidieron no acompañar la medida responden a una decisión consensuada por el Consejo Directivo de la CGT "ante lo encaminadas que se encuentran las negociaciones con funcionarios del gobierno nacional por diferentes reclamos sindicales". "Un paro es una legítima medida que pueden adoptar los trabajadores para expresar su descontento cuando no hay respuestas a los reclamos, pero en este caso no se justifica porque hay negociaciones y el gobierno nacional ha comenzado a dar soluciones con el tema de ganancias, con la deuda de las obras sociales y con los tratamientos de alta complejidad médica", agregó Caló.

En idéntico tenor se expresaron los secretarios de Acción Social y de Actas de la central obrera, José Luis Lingeri (SGBATOS) y Roberto Fernández (UTA), quienes manifestaron a la agencia oficial Télam su disconformidad con la medida de fuerza. Lingeri precisó que "el plenario de delegados de Obras Sanitarias en sintonía con lo dispuesto por el Consejo Directivo de la CGT, resolvió no adherir al paro porque los funcionarios van solucionando los reclamos, como el caso del aumento de la cápita que paga el PAMI a las obras sociales, que pasó de 148 a 192 pesos".

Por su parte, Fernández dijo "estamos de acuerdo con los reclamos, pero entendemos que la medida de fuerza no tiene sustento porque hay conversaciones para encontrar soluciones". Entretanto el delegado de la UTA, Néstor Marcolín desmintió ante Télam que los choferes de la línea 60 se vayan a plegar al paro de mañana, y manifestó que "adherimos al reclamo y vamos a hacer asambleas, pero no vamos a paralizar los servicios". También añadió que "responsabilizamos a la empresa por la seguridad de los trabajadores".

Entre los gremios que integran la CGT y no adhieren al paro figuran además de los metalúrgicos de Caló y los mecánicos de Ricardo Pignanelli, los estatales de UPCN que lidera Andrés Rodríguez; los choferes de UTA que encabeza Fernández y los docentes privados representados en la CGT por Horacio Ghilini. Tampoco pararán los trabajadores de Sanidad de Carlos West Ocampo y Héctor Daer; los mercantiles de Armando Cavalieri; los legislativos de Norberto Di Próspero; los químicos de Rubén Salas; los lucifuercistas de Oscar Lescano; taxistas de Omar Viviani y la Unión Ferroviaria, representada por Eduardo Fuertes en la CGT.

No serán de la partida los Municipales bonaerenses, Modelos, Vestido, Aduana, encargados de edificios; La Fraternidad; Construcción, Docentes, Alimentación, Prensa y Neumático, entre otros.

Adhieren al paro los camioneros de Moyano, en cambio, los rurales de Gerónimo Venegas; los municipales porteños de Amadeo Genta; los pilotos de Jorge Pérez Tamayo; judiciales de Julio Piumato; bancarios de Sergio Palazzo, canillitas de Omar Plaini y los petroleros de Guillermo Pereyra. También se plegarán los gremios de CEAMSE, Gastronómicos; Dragado y Balizamiento, de Juan Carlos Schmid; AFIP; estaciones de Servicio, de Carlos Acuña; técnicos aeronáuticos, de Ricardo Cirielli y los estatales de ATE, entre otros.

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El secretario general de la CTA disidente, Pablo Micheli, justificó que se realicen piquetes durante el paro. "De lo que se trata es que quien tenga ganas de ir a trabajar, no vaya". Reclamó la modificación del impuesto a las ganancias "en algunos casos" y la eliminación "en otros" y una bonificación especial de 4000 pesos "para todos los trabajadores argentinos".
 
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