El huracán Nº 13 de la temporada se llama María, y ayer continuaba intensificándose sobre el océano Atlántico, aunque no implicaba en principio una amenaza para tierra firme, según los servicios de meteorología estadounidenses. En ese momento, el ojo del huracán estaba a 765 kilómetros al este de las Bermudas y avanzaba hacia el norte a unos 13 kilómetros por hora, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami. Con vientos de cerca de 160 km/h, María es un huracán tipo dos. Katrina, en el momento de tocar tierra, era categoría cuatro. Según el NHC, María podría formar una depresión tropical en los próximos dos días. Pero se esperaba que torciera su rumbo hacia el noroeste. “Con este movimiento, quedaría claramente al este de Bermuda y con ello representaría sólo un peligro para la navegación”, dijo la NHC. Este organismo había pronosticado para 2005 una temporada de huracanes más intensa de lo normal, con 12 a 15 tormentas tropicales entre junio y noviembre.