Imprimir|Regresar a la nota
Espectáculos|Lunes, 27 de mayo de 2002
ROMAN POLANSKI GANO LA PALMA DE ORO EN CANNES

Un exorcismo del Holocausto

El cineasta de origen polaco obtuvo el premio gracias a “El pianista”, film basado en las memorias del músico Wladyslaw Szpilman.

/fotos/20020527/notas/pag25.jpg
Este galardón tiene para Polanski un significado muy especial.
Después de muchos años en que su figura estuvo más acompañada por la leyenda que por realizaciones cinematográficas con peso propio, Roman Polanski volvió a inscribir su nombre en lo más alto. Ayer fue distinguido con la Palma de Oro del 55º Festival de Cine de Cannes por El pianista, la película en la que por primera vez aborda el capítulo más doloroso de su infancia, el Holocausto. Se escucharon algunos abucheos en la sala donde la crítica internacional acreditada seguía la ceremonia de clausura. En contra de la película premiada se argumentó que es una producción muy académica sin nada novedoso, pero por otra parte también se elogió la emoción contenida sobre todo en su protagonista, el estadounidense Adrien Brody. El drama está basado en las memorias del brillante pianista polaco Wladyslaw Szpilman, sobreviviente del gueto de Varsovia gracias a la ayuda de un oficial alemán. Se trata de un texto notable, que también inspiró al músico uruguayo Jorge Drexler para componer una excelente canción de su último disco.
Polanski, nacido en 1933, con más de 25 films en su trayectoria (entre ellos, muchos emblemáticos, como El bebé de Rosemary y Chinatown) esperó tantos años para hacer esta película porque no había encontrado el material adecuado para abordar el tema. La pulsión de una persona que ha vivido el exterminio de su pueblo, el judío, se deja sentir en esta película del cineasta de origen polaco. Una de los films favoritos de la muestra, el finlandés Un hombre sin pasado, de Aki Kaurismaki, tampoco se fue con las manos vacías. Obtuvo el Gran Premio del festival. El director recibió una fuerte ovación y su actriz fetiche y protagonista de la película, Kati Outinen, se llevó el galardón a la mejor actriz.
El realizador español Pedro Almodóvar, que en 1999 ganó el premio al mejor director por Todo sobre mi madre, bromeó antes de entregar el mismo premio diciendo: “Gracias Francia, vosotros sabéis por qué”. Hacía referencia a la buena acogida que siempre tuvieron sus películas entre los franceses. Haciendo todavía un poco más larga la espera, el director manchego defendió el cine que se hace en su país al afirmar: “El cine español también existe”. Seguidamente entregó el premio al mejor director (que fue ex aequo) para uno de los nuevos valores del cine estadounidense, Paul Thomas Anderson, por la comedia romántica Punch-Drunk Love, y para el gran maestro del cine surcoreano Im Kwon-Taek, por la película épica Chihwaseon. Este año no hubo ninguna película latinoamericana en la sección oficial. Pero Argentina estuvo representada por El bonaerense, de Pablo Trapero, que participó en la sección paralela “Un certain regard” (Una cierta mirada) y Un oso rojo, de Adrián Caetano, seleccionada para la “Quincena de realizadores”. Y el argentino radicado en Francia Gaspar Noé participó de la competencia oficial con el film francés Irreversible.
El belga Olivier Gourmet se llevó el premio al mejor actor por su impresionante interpretación de padre marcado por la pérdida de un hijo en la película de los hermanos belgas Jean Pierre y Luc Dardenne El hijo. Gourmet ya participó en el anterior film de los realizadores belgas, Rosetta, ganadora en su momento de la Palma de Oro. Bowling for Columbine, el documental del estadounidense Michael Moore que aborda la cultura de la violencia en Estados Unidos, se llevó el Premio del 55º aniversario del Festival de Cannes. El primer documental que entra en la competición en 46 años tuvo una excelente acogida, al igual que Divine Intervention, la película escrita, dirigida y protagonizada por el palestino Elia Suleiman, que se llevó el Premio del Jurado. El film de Suleiman, que también obtuvo el premio de la federación internacional de críticos de cine, Fipresci, aporta un novedoso tratamiento del conflicto palestino israelí con un humor inteligente y una inaudita ironía.
La actriz francesa Virginie Ledoyen condujo la gala de clausura a la que el presidente del jurado, David Lynch (que hace doce años sacudió este certamen con Corazón salvaje), llegó acompañado del brasileño Walter Salles y la actriz estadounidense Sharon Stone, que lucía un escotado y largo vestido dorado. Ellos conformaron el jurado de la sección oficial,junto con los realizadores Raúl Ruiz (Chile-Francia), Claude Miller y Régis Wargnier (Francia), y las actrices Michelle Yeoh (Hong Kong) y Christine Hakim (Indonesia).
Desde las primeras horas de la mañana, y pese al implacable sol, decenas de personas esperaron pacientemente frente a la alfombra roja para ver a sus estrellas. Por allí pasaron, entre otros, las actrices Emily Watson, Andie Mac Dowell, Geraldine Chaplin, Juliette Binoche, Kristin Scott Thomas y Melanie Griffith –inseparable de su esposo, Antonio Banderas–, así como Almodóvar, que estuvo acompañado por una de sus nuevas chicas, Paz Vega.
Con la proyección de And Now Ladies & Gentlemen, del francés Claude Lelouch, se cerraron doce días de cine en los que se han vivido momentos vibrantes, como la primera visita del director Woody Allen, quien estrenó en Europa Hollywood Ending, una comedia en la que parodia la industria del cine en su país, Estados Unidos. En realidad, la presencia de Hollywood en el festival fue más interesante de lo previsto. Hubo emoción cuando, durante el homenaje al fallecido realizador Billy Wilder, Martin Scorsese regaló a los espectadores un avance de 20 minutos de su nueva película, Gangs of New York. También fueron seguidas con máxima atención la presencia en Cannes de Jack Nicholson, protagonista de About Schmidt, incluida en la competición oficial, o la de George Lucas, que acudió a esta ciudad costera a orillas del Mediterráneo el mismo día del estreno mundial del segundo capítulo de la nueva saga de La guerra de las Galaxias, El ataque de los clones. Cannes y su playa, La Croisette, recuperarán hoy la calma, después de su cita anual con el glamour y el buen cine.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.