La violencia en el fútbol esta vez tuvo otra faceta: un grupo de delincuentes intentó asaltar ayer la sede de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Tras un tiroteo, un policía retirado de la Federal que trabajaba como custodio falleció no por acción de las balas sino víctima de un ataque al corazón. Osvaldo Moro, de 63 años, trabajaba desde hacía más de 20 años en la entidad de Viamonte al 1300.
En la tarde de ayer, dos hombres ingresaron al edificio y robaron en una oficina del sexto piso. Cuando regresaron a planta baja, fueron enfrentados por el jefe de seguridad de la AFA, José Pantano, y el subcomisario Darío Perrone, de Eventos Deportivos de la Policía Federal. Moro –que estaba desarmado– cerró la puerta para evitar la fuga. Finalmente, los ladrones, uno de los cuales había resultado herido, se entregaron. El custodio comenzó a manifestar síntomas de un infarto. Una ambulancia del SAME lo trasladó al hospital Argerich, pero falleció en el trayecto.