Más de 30 horas después del arresto de Miguel Ángel Treviño Morales, el "despiadado líder de Los Zetas", según lo calificó la DEA, ninguno de los máximos funcionarios del gobierno de México comentaba todavía la noticia. Ni discursos inmediatos de júbilo ni reacciones en Twitter.
Peña Nieto se refirió al tema de forma superficial durante un acto de inauguración en un centro de investigación y desarrollo, en el que se centró en temas de inversión, y al final refrendó su compromiso con el estado de derecho y felicitó a las fuerzas de seguridad.
Un portavoz de seguridad fue el encargado de dar la noticia a la prensa la noche del lunes, cuando habían pasado 17 horas desde la detención. El vocero señaló que Treviño fue capturado "sin un solo disparo" e informó que se lo acusa de ordenar la captura y muerte de 265 migrantes en la localidad de Tamaulipas.
El gobierno rompió con una costumbre de presentar a los capturados de la "guerra contra el narcotráfico" como botín de guerra y el líder de Los Zetas no fue exhibido ante periodistas, fotógrafos y cámaras de televisión con las manos esposadas y chaleco antibalas.
Hace algunos días, el Comisionado Nacional de Seguridad, Manuel Mondragón, sostuvo en una entrevista: "Yo creo que desde que llegamos, sin echar las campañas al vuelo, hemos ido dando pasos adelante día a día".
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.