Por su parte, María Natalia Suárez Nelson acusó durante su declaración a su supuesto apropiador de haber obstaculizado la posibilidad de conocer su verdadera identidad. "Alonso es una persona manipuladora", sentenció.
"Si las cosas son como pensamos, el uniformado y el civil cómplice que se apropió de Natalia recibirán el castigo que corresponde, porque (la apropiación de bebés) es un delito de lesa humanidad que no prescribe, ni es amnistiable", opinó la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.
En ese sentido, añadió que las Abuelas hicieron "un gran esfuerzo para poder encontrar la identidad de la joven apropiada", porque "Omar Alonso, un cantor de tangos muy cercano a la dictadura militar, recibió a esta criatura de manos de un marino y se fugó a Paraguay".
"Nosotras lo buscamos y lo encontramos, fue tomado preso, juzgado y, lamentablemente, sobreseído", contó la titular del organismo de derechos humanos y aclaró que "ahora que se descubrió el delito, que Natalia es hija de desaparecidos, ella recuperó sus derechos y su identidad, y va a declarar".
El Tribunal Oral Federal 1, presidido por Carlos Rozanski e integrado por Roberto Falcone y Mario Portela, juzga la causa que investiga la apropiación de Natalia Suárez Nelson, hija de María Elena Isabel Corvalán y Mario César Suárez Nelson, ambos desaparecidos durante la última dictadura.
La niña fue entregada a Omar Alonso por el capitán de navío de Infantería de Marina Juan Carlos Herzberg, según se acreditó en la causa que instruyó el juez federal de La Plata Arnaldo Corazza.
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