Pirulo de tapa

La revelación sobre la existencia de una cuenta de un millón doscientos mil dólares en Andorra, que compartía con el empresario del fútbol Francisco “Paco” Casal, no sólo le costó a Valentín Díaz Gilligan su puesto en el gobierno. Ayer, los miembros de la Comisión Fiscalizadora de River Plate solicitaron al presidente del club, Rodolfo D’Onofrio, que el ex subsecretario general de la Presidencia también deje el cargo que tiene en esa institución. Consideraron “absolutamente incompatible” su lugar en la comisión directiva “con sus funciones reconocidas en sociedades dedicadas a la intermediación deportiva”.