El padre del niño de siete años con síndrome de Down que murió tras caer de un séptimo piso en un departamento de La Plata se declaró inocente y negó las acusaciones de su ex esposa acerca de que empujó a su hijo al vacío.

Diego Villanueva, de 38 años, papá de Renzo, de 7, declaró ayer  ante el fiscal Marcelo Romero y presentó fotos en las que se podía observar a su hijo jugando normalmente y con movilidad propia. Villanueva afirmó que vio a Renzo cuando “estaba trepado al balcón y casi en el aire”, manifestó que tenía una excelente relación con su hijo y reafirmó su postura de que se trató de un hecho “accidental”.

Mientras tanto, Rosa Martignoni, de 38, madrastra de Renzo, se descompensó en la reunión previa con sus abogados y se negó a declarar.

Ahora, la fiscalía tiene 15 días para expedirse sobre si corresponde la prisión preventiva de la pareja, mientras que los abogados de Martignoni pueden solicitar una nueva audiencia o bien optar porque no declare.

El padre y la madrastra del niño quedaron detenidos el viernes luego de que la Cámara de Apelaciones de La Plata rechazara un recurso de apelación contra la denegatoria de eximición de prisión para ambos, acusados de los delitos de homicidio simple y homicidio calificado por el vínculo.

Sobre la pareja pesaba una orden de detención desde el pasado 19 de diciembre, pero aún no se había efectivizado porque ambos habían recurrido la denegatoria de la exención de prisión, que finalmente quedó confirmada este viernes por la Sala IV de la cámara platense.

La detención de la pareja había sido solicitada por el fiscal Romero tras recibir el informe elaborado por la Policía Científica y la DDI de La Plata, en base a la reconstrucción de la caída, que no descartó la participación de un tercero en la muerte del niño, por lo que la causa fue recaratulada como “homicidio”. Los peritos concluyeron que la caída del niño “necesariamente debió tener una velocidad inicial, producto de un impulso” y afirmaron que “de todo lo expuesto no podría descartarse la participación de un tercero como desencadenante de los sucesos”.

Romero pidió la detención del padre y su pareja, ya que eran los que estaban con el niño al momento de la caída, el 10 de octubre.

Para Angela Donato, madre de Renzo, no hay dudas de que el padre lo arrojó por la ventana, afirmación que respaldó en las veces que lo denunció cuando el nene volvía de las visitas con hematomas y golpes.