El conflicto con los empleados de Newell's amenaza con derivar en nuevos juicios a la entidad del parque Independencia. En una reunión que tuvo lugar en el Ministerio de Trabajo ayer por la mañana, la Comisión Directiva solo se comprometió a pagar el sueldo de febrero y dejó sujeta a la "disponibilidad de fondos" la propuesta para el saldo de las indemnizaciones. Los trabajadores evalúan ahora la opción judicial dado que además hay atrasos de meses en el abono de aportes. En el inicio de mes la directiva echó a doce trabajadores para ahorrar a su tesorería medio millón de pesos mensuales.

El presidente Eduardo Bermúdez y su Comisión Directiva dejaron sin su fuente laboral a doce empleados del club, entre trabajadores de mantenimiento en la sede del Parque Independencia y profesionales de divisiones inferiores de Bella Vista. El club quiere pagar solo la mitad de la indemnización y para eso aduce que atraviesa un proceso de crisis, en el marco de su Fideicomiso. Pero la estrategia de desprenderse de los trabajadores por menos plata de lo que dice la ley de Contrato de Trabajo expone a la entidad a nuevos juicios, al menos de parte de ocho de los doce empleados cesanteados.

En reunión que tuvo lugar ayer por la mañana en el Ministerio de Trabajo, los dirigentes no acudieron al cónclave y se refugiaron en la asistencia de los abogados del club. Los apoderados de la entidad informaron que "en el transcurso" de la semana los trabajadores despedidos recibirán el pago del sueldo de febrero. No se trató la posibilidad de recuperar las fuentes laborales en ninguno de los casos, planteo que ni siquiera hizo el gremio Unión de Trabajadores de Entidades Deportivas y Civiles.

Utedyc planteó cobrar la totalidad de las indemnizaciones en el marco de la Ley, ante la propuesta del club de abonar solo el 50 por ciento. De igual modo, la liquidación de la ruptura laboral decidida por el club no tiene aún fecha cierta. En la reunión los abogados de la institución hicieron saber que "en la medida que existan fondos disponibles se procederá a efectuar una propuesta a los reclamantes". Ergo: cuando el club reciba algún ingreso de dinero se verá.

El ofrecimiento de la institución está muy lejos de ajustarse a ley y por eso ocho de los doce trabajadores despedidos evalúan la instancia judicial para hacer valer sus derechos. Los ex empleados no solo dejaron constancia de que exigirán el cumplimiento de la liquidación del 100 por ciento de la indemnización sino que también advirtieron que los dirigentes tienen un atraso de meses en el pago de aportes previsionales y de obra social, lo que podría configurar "la posible comisión de ilícitos por retención indebida".

"No se puede hacer ningún ajuste más en el fútbol profesional, el equipo es el más barato que hoy juega en el fútbol argentino, por eso se decidió meter mano en la planta del personal. El déficit mensual era de siete millones de pesos hace un año y ahora se bajó a dos millones", confió un colaborador de la dirigencia.