El proyecto de reestructuración del fútbol de ascenso incluiría dos zonas de 20 equipos para la B Nacional, con dos ascensos a la Superliga –uno por zona– y la posibilidad de que un club de esa categoría dispute la Copa Sudamericana, una iniciativa que luego de ser aprobada por los clubes argentinos deberá recibir el visto bueno de la Conmebol.