El gobernador Miguel Lifschitz se reunió ayer con el presidente de YPF, Miguel Angel Gutiérrez, para que la petrolera estatal forme parte de la solución para el salvataje de la ex Refinería San Lorenzo. "El tema está en manos del juez, pero tienen interés y predisposición a participar y a colaborar, lo cual es un buen dato para Santa Fe", señaló el mandatario. La planta, que ocupa directamente a más de 400 personas y otras mil indirectamente, está parada desde hace un mes. El gremio petrolero había propuesto que YPF le venda crudo a la Refinería, una de las alternativas comerciales planteadas para evitar su paralización. Además de la preocupación por los puestos de trabajo, hay temores por el riesgo ambiental. Inspectores del Ministerio de Trabajo provincial presentaron un informe donde resaltan que se necesitan 100 personas para mantener las condiciones medioambientales actuales. "A partir de este informe seguramente el gobernador habrá decidido pedir una reunión urgente con YPF porque la solución es con la Refinería en marcha", planteó Héctor Brizuela, dirigente del Sindicato Unidos Petroleros e Hidrocarburíferos (Supeh).

Lifschitz le había solicitado al titular de YPF el pasado martes una reunión de urgencia por la ex Refinería San Lorenzo, cuya planta está parada desde los primeros días de marzo. La respuesta no tardó en llegar. El gobernador, acompañado por la ministra de la Producción, Alicia Ciciliani, y la secretaría de Energía, Verónica Geese, fue recibido ayer por Gutiérrez. Al término del encuentro, el mandatario dijo que YPF "conoce muy bien el tema, lo han analizado, pero no pueden intervenir en la medida que no haya una decisión del juez en relación a cómo avanzar con la situación de la planta".

El gobernador se refirió a la decisión que tomó anteayer el titular del juzgado Nacional en lo Comercial 5, Javier Cosentino, de intervenir directamente Oil Combustibles por "severas irregularidades". El magistrado desplazó a los anteriores directores y designó tres coadministradores como interventores. "Ahora se abre una perspectiva de encauzar la situación en dos etapas. Una que debe ser transitoria para tratar de mantener el funcionamiento de la Refinería y bocas de expendio que tiene la empresa, evitar la pérdida de las fuentes de trabajo y problemas ambientales. Y después una solución más de fondo, de acuerdo a cómo avance la causa judicial", señaló Lifschitz.

Desde el Supeh, que había solicitado a la Federación de Sindicatos Petroleros que realice gestiones para que YPF tome el control de la Refinería, adelantaron que los interventores judiciales pidieron una reunión urgente con la AFIP porque la iliquidez financiera de la empresa es total. "Ni siquiera se van a poder pagar los gastos corrientes, unos 50 millones de pesos mensuales. Por eso pedimos que la AFIP nos defina si va a poder hacer una quita o una espera para que aparezca algún tercero, que podría ser YPF, para que comience a funcionar", planteó Brizuela.

El dirigente petrolero agregó que la AFIP también debería autorizar el levantamiento de las medidas cautelares y los embargos de las cuentas bancarias por 900 millones de pesos. "Si eso no se produce no va a haber salida", subrayó. El Supeh presentará un escrito para participar de la reunión entre los interventores y los funcionarios del organismo nacional. "Los trabajadores queremos estar y dar de primera mano nuestra versión sobre los dos problemas que tenemos en San Lorenzo, el social-económico y el impacto ambiental. Queremos que la AFIP nos escuche y en todo caso se haga responsable de lo que pase ante una eventual quiebra y pague el costo político", advirtió.