Las ciudades argentinas son hasta 1,5 grado más calientes que sus entornos, según un informe de la Universidad de Buenos Aires (UBA), que asegura que esta condición es consecuencia directa de la urbanización de la tierra y propone alternativas sustentables para aprovechar la energía y revertir la acumulación de calor.

El informe arrojó estos valores tras medir, analizar y comparar las temperaturas de 33 centros urbanos de distintos puntos del país con sus entornos no urbanizados.

De este modo, los resultados aseguran que las ciudades argentinas son 1,5 grados más calientes que sus alrededores durante la noche y 0,72 durante el día, en promedio. 

Los especialistas que realizaron la investigación aseguran que el fenómeno, denominado “islas de calor urbanas” (ICU), es uno de los tantos impactos que tiene la urbanización de la tierra sobre sus habitantes y adquiere una relevancia especial en un contexto en el que la población nacional urbana supera el 90 por ciento del total.