El Gobierno fijó ayer nuevos precios provisorios del bioetanol para marzo y abril, con incrementos que varían entre el 11 y el 18 por ciento, ya sea derivado de la caña de azúcar o del maíz, por lo cual las petroleras advirtieron sobre el impacto que la medida puede tener en el valor de las naftas. Los nuevos valores de los biocombustibles, utilizados para el corte del 12 por ciento de las naftas, fue a dado a conocer mediante la resolución 92 publicada en el Boletín Oficial, tras lo cual el ministro de Energía, Juan José Aranguren, afirmó que un eventual aumento de los combustibles “es una decisión que tienen que tomar las compañías”. El precio de los biocombustibles es la única referencia de costo regulada que incide en el precio final del litro de nafta o de gasoil, y al que las petroleras suman el precio internacional del barril de petróleo del tipo Brent, la evolución del tipo de cambio y el incremento inflacionario que afecta sus procesos de producción. En base a esa fórmula polinómica, las principales petroleras admitieron ayer que los nuevos valores de los biocombustibles suman mayor presión a las naftas, aunque aseguraron que por el momento no hay decisión tomada de modificar los precios en los surtidores.