Caritas perderá desde el próximo 1º de abril el manejo de los aproximadamente 1,4 millones de euros que recauda en concepto de monedas arrojadas por año a la Fontana di Trevi en Roma. A partir de la próxima semana, será el ayuntamiento de Roma el que gestione ese dinero. Así quedó estipulado en una directiva del gobierno de la ciudad. 

Se calcula que por día se arrojan 3800 euros en monedas a las aguas de la fuente, según marca la tradición para expresar el deseo de volver a Roma. El vicealcalde Luca Bergamo y la asesora para las políticas sociales Laura Baldassarre firmaron la normativa, que no cayó bien en la Iglesia.

Según el diario La Repubblica, representantes de la Iglesia y de la alcaldía mantienen reuniones durante Semana Santa, a fin de suspender la aplicación de la norma por lo menos hasta fin de año y poder mantener el caudal de dinero que la fuente le daba a la fecha a Caritas para obras de caridad.

La Fontana di Trevi fue construida en 1762 y es uno de los mayores monumentos del Barroco en la capital italiana. Es la más representativa de conjunto de fuentes que se construyeron en Roma al promediar el siglo XVIII. En 1960, obtuvo fama mundial por la célebre escena de La Dolce Vita de Federico Fellini, en la que Anita Ekberg se metía dentro de la fuente e invitaba a Marcello Mastroianni a seguirla.