El fiscal de Rosario, Gustavo Ponce Asad, aseguró que "hay 15 personas identificadas y localizadas que están en condiciones de ser detenidas" por realizar amenazas a través de WhatsApp contra referentes de derechos humanos, sociales y políticos. La denuncia fue realizada la semana pasada por el Espacio Juicio y Castigo Rosario ante el Ministerio Público, luego de que alrededor de 300 referentes de organizaciones de derechos humanos, sociales, sindicales y políticas recibieron amenazas como "están todos secuestrados", "disfruten sus últimas horas libres" o "prepárense para ser raptados".

Ponce Asad, a cargo de la causa por "amenazas, hostigamiento e intimidación masiva", explicó que los posibles responsables "fueron geolocalizados en las ciudades de Rosario, Buenos Aires y Córdoba" y resaltó que también "se identificó un chip telefónico en el país de procedencia estadounidense".  El representante del Ministerio Público aseguró que mientras tanto se mantiene "las medidas de protección pertinentes para todos los implicados", ya que se trata de "un caso de conmoción y gravedad institucional".

Como denunció RosarioI12, el miércoles pasado, referentes del movimiento de derechos humanos, dirigentes sindicales, sociales y legisladores nacionales, provinciales y locales, acompañados por el Espacio Juicio y Castigo Rosario, denunciaron que fueron incluidos en grupos creados en la red social bajo el título "Muerte a Milagro Sala" o "Tucu (Costanzo) vive", en referencia a un represor condenado por delitos de lesa humanidad a quien se vio recientemente violando su prisión domiciliaria. 

En los grupos fueron "intimidados y amenazados compulsivamente", sostiene la denuncia. Tras la cual, según reconoció el fiscal Ponce Asad, las amenazas "se intensificaron" con una nueva proliferación de grupos, por lo que la denuncia fue ampliada el sábado en la fiscalía.

La abogada de Hijos-Rosario Nadia Schujman había precisado en diálogo con RosarioI12  que las denuncias se intensificaron después del 24 de marzo: "Aparecía un grupo tras otro, con mensajes sumamente intimidantes, fotos y reivindicaciones de los genocidas y amenazas. La metodología era incluirnos en esos grupos para empezar a mandarnos esto". Por su parte,  Iris Pérez, del Espacio Juicio y Castigo, había lamentado:  "Esto es un volver a 42 años atrás. Creemos que están mezclados trolls, trabajando para este gobierno nacional, y que también hay servicios de informaciones. Además de grupos que apuntan a la teoría de los dos demonios".