Cuatro delincuentes armados y vestidos de policías irrumpieron hoy en la comisaría de la localidad bonaerense de San Justo en un aparente intento por liberar a presos alojados allí, aunque fueron rechazados por los agentes policiales en un tiroteo en el que fue gravemente herida de dos balazos una sargento, Rocío Villarreal, ahora internada en el Hospital Paroissien.

El episodio se registró minutos después de las 5 en la seccional situada en Villegas 2459, de San Justo, partido de La Matanza, a la que ingresaron cuatro hombres vestidos con gorras y camperas negras con la inscripción "Policía" y armados con pistolas.

El jefe de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, Fabián Perroni, informó que los cuatro delincuentes llegaron en auto al lugar y que todos estaban armados. "Dos entraron a la guardia, donde estaba Villarreal,  y directamente empezaron a disparar", relató el jefe policial en la puerta de la comisaría atacada.

Perroni dijo que los agresores sólo gritaron "quietos, quietos" y que luego "tiraron a matar, con un desprecio total por la vida de Rocío y de los compañeros". Si bien el jefe de la policía provincial manifestó se negó a adelantar ninguna hipótesis de la investigación, contó que en esa dependencia hay 46 detenidos, varios de ellos integrantes de la barra brava del club Almirante Brown de Adrogué, que fueron arrestados el 26 de este mes en el marco de una causa por venta de drogas.

El intento de copamiento fue repelido por la sargento herida y por los otros tres policías que se hallaban en la oficina de guardia. En medio del tiroteo, en el que se efectuaron numerosos disparos que causaron destrozos en el interior de la seccional, los delincuentes escaparon, uno de ellos a pie y otros tres en un auto Volkswagen Gol Trend color gris.

Perroni contó que la sargento tiene una herida de bala, con orificio de entrada y salida, en el antebrazo derecho, y otro sólo con orificio de ingreso en el abdomen, por lo que su estado es "delicado".

La investigación quedó a cargo de la fiscal 8 de La Matanza. Alejandra Núñez, quien dispuso las primeras diligencias en la comisaría, a cargo de la Policía Científica. Los peritos levantaron en la comisaría vainas servidas calibre 9 milímetros pertenecientes a las armas de la policía y de los delincuentes, mientras que en el ingreso a la dependencia hallaron  un chaleco de transporte negro con inscripción "Policía" y a unos metros, en la calle Almafuerte, entre Villegas e Irigoyen, una pistola marca Taurus 9 milímetros y un buzo gris.

Perroni reconoció, además, que la comisaría tiene actualmente alojados a 46 presos, más del doble de la capacidad permitida, que es de 18. No obstante, aclaró que en la sede policial estaba presente todo el personal previsto, entre ellos el imaginaria que cuida los calabozos y el subcomisario a cargo.