La CGT responsabilizó al gobierno nacional por el allanamiento realizado el viernes en la sede del sindicato de Camioneros y sostuvo que esa medida fue un intento de “amedrentar a las organizaciones sindicales que plantean disidencias con las políticas públicas”. Además le exigió a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que “brinde una disculpa pública” por “la irrupción violenta” en la sede gremial por parte de las fuerzas que comanda. La dura reacción de la central fue también un respaldo al gremio que conduce Hugo Moyano y que fue allanado por tercera vez en dos días.