Estados Unidos puso ayer un freno a la posibilidad de una inminente guerra comercial con China al confirmar la decisión de suspender la imposición de aranceles a productos del país asiático por el equivalente a 150.000 millones de dólares, al menos mientras continúan las negociaciones para reducir el déficit comercial que tiene con Pekín. “Estamos poniendo en suspenso la guerra comercial”, dijo Mnuchin en una entrevista con la cadena de televisión Fox News. “Hemos acordado poner en suspenso los aranceles mientras ejecutamos el acuerdo marco” comercial, aseguró el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, y subrayó que esas tarifas “siempre pueden volver a imponerse” si fracasan las conversaciones con Pekín.