La CGT denunció, a través de un comunicado, que la represión contra los trabajadores del subte y el Premetro, que reclaman la reapertura de la paritaria firmada entre el Ejecutivo porteño y la UTA, es "una muestra más del camino elegido (por el Gobierno nacional) para aplicar el ajuste económico, social y laboral". Advirtió, además, que la imposición de un aumento del 15 por ciento que quiere imponer la alianza gobernante en las paritarias a pesar de que ya todas las encuestadoras privadas prevén una inflación este año superior al 25 por ciento, es una "herramienta de disciplinamiento" social.