Una nutrida movilización contra los tarifazos confluyó ayer al mediodía frente a las oficinas del Ente Nacional de Regulación de Gas (Enargas) en Corrientes al 500. Recolectores, junto al Movimiento Evita, la CCC, Multisectorial contra los Tarifazos y otras agrupaciones se unieron en un pedido unificado: el freno a las subas de servicios que dispone el gobierno nacional por dos vías: retiro de subsidios y aumento de precios de la energía mayorista y gas en boca de pozo.

Con banderas de varios sectores políticos y sociales, la marcha partió desde las calles La Paz y Corrientes hasta la sede local de Enargas, donde se desarrolló el acto central.

El concejal Eduardo Toniolli señaló que el acto se realizó "contra una política que ya no va más y que es pedirle a la ciudadanía y al pueblo trabajador esfuerzos que no se le exigen al sector minero, al complejo agroexportador o a las bancos, que son los sectores más concentrados que se la están llevando en pala".

"Hay millones de argentinos que no llegan a fin de mes porque el 30 por ciento de sus salarios lo utilizan para pagar el gas, la luz y el agua, que son derechos humanos básicos", agregó el edil del Movimiento Evita.

Toniolli pidió al gobierno "no golpear el bolsillo de los trabajadores porque socialmente empezamos a ver hambre como hacia décadas no ocurría". "Son trabajadores que tienen un sueldo formal y que no pueden llegar a fin de mes por esta política de servicios públicos. Dejen de regalarle a las petroleras y a los socios de (Juan José) Aranguren, y redistribuir a favor del pueblo", amplió.

Por su parte, Marcelo "Pipi" Andrada, titular del Sindicato de Recolectores de Rosario, aseguró que se sumó al reclamo en "solidaridad con los compañeros más afectados". "Acá en Santa Fe la cantidad de fábricas que están cerrando y las empresas que están concursando es impresionante", dijo Andrada y llamó a "hacerle entender al gobierno nacional que llame a un consenso".