Según un informe que presentó Socorristas en Red, un espacio que agrupa a organizaciones que asesoran y acompañan a mujeres que deciden interrumpir su embarazo, el 57,2 por ciento (3357 mujeres) de quienes se acercaron a realizar una consulta ya habían sido madres. El dato desmiente a quienes acusan a las mujeres que apoyan el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo de no querer tener hijos. 

Las activistas hicieron el estudio basado en 5871 entrevistas a mujeres que las contactaron durante el año pasado. Según los resultados, el 72,9 por ciento tenía entre 20 y 34 años. Entre las causas de las mujeres para explicar por qué decidieron abortar, el estudio indicó que el 43,4 por ciento dijeron que no desean ser madres en ese momento de sus vidas e incluso a futuro, que tienen muchos hijos o que no quieren tener un hijo con la persona de la que quedaron embarazadas. 

Otro indicador relevante es que el 58,3 por ciento de las entrevistadas aseguraron tener creencias religiosas.

“Producir datos siempre estuvo presente en nuestro espacio porque implica una disputa por los sentidos; poder demostrar que las mujeres adultas abortan y que también lo hacen las creyentes; es una forma de derribar mitos”, afirmó Ruth Zurbriggen, de Colectiva Feminista La Revuelta.