El presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, defendió la operación de los servicios secretos de su país para fingir el asesinato del periodista opositor ruso, Arkadi Bábchenko (foto), en medio de las críticas en todo el mundo que cuestionaron la moralidad de su actuación. “Ayer por la televisión se pudo ver el resultado de una brillante operación ejecutada por héroes del Servicio de Seguridad de Ucrania”, dijo el mandatario. Bábchenko, por su parte, dio detalles, en una conferencia de prensa ayer, de la puesta en escena para fingir su asesinato, del que Ucrania culpó a Rusia y que habría tenido el objetivo de salvar su vida de un complot de Moscú para matarlo. El periodista contó que en la noche del pasado martes enviaron a su casa a un maquillador de artistas, le entregaron una camiseta con agujeros de bala y lo rociaron con sangre de cerdo. Fuentes oficiales ucranianas anunciaron el martes que Bábchenko había muerto tiroteado en la puerta de su casa y publicaron sus fotos en un charco de sangre. El miércoles reapareció para sorpresa de todo el mundo, incluyendo a su familia, en una rueda de prensa con los servicios de seguridad ucranianos, que explicaron que todo fue un montaje. “Disculpas especiales a mi esposa, Olechka, no había otra opción”, dijo Babchenko. El responsable de la inteligencia ucraniana, Vassili Grizak, informó que el presunto autor frustrado del asesinato ya había sido detenido. Según Grizak, le habían prometido 30.000 dólares al sospechoso y otros 10.000 para un intermediario.