Ciencia, juegos, cultura, tecnología, matemática y arte en una revista que se dirige a niñas y las interpela directamente. “Pensamos que al hablar de otras mujeres que son intrépidas de diversas maneras, colaboramos en la generación de un espacio donde los estereotipos de género no las determinen”, dice Ángeles Estrada Vigil, su creadora, que empezó a gestar la revista a fines de 2016. “Un poco como respuesta para poder darles a mis hijas un medio que respondiera a la necesidad de explorar, construir y experimentar. Ellas crecieron con una madre que construye espacialmente, que experimenta, que si bien no es científica sino diseñadora industrial, quería acercarles contenido que las divirtiera desde ese lugar.” Un proyecto colectivo donde redactoras e ilustradoras aportan lo suyo para la construcción de un pensamiento crítico que ayude a empoderarlas. Una de las secciones de Intrépidas es el “Laboratorio de Vika”, donde en el número dos de la revista hablaron sobre los olores del cuerpo y por qué no hay que sentirse avergonzadas de ellos. “A partir de esta observación tratamos de entender químicamente qué pasa con el sudor y propusimos hacer un desodorante casero con bicarbonato de sodio y aceite de coco que nos permita combatir esas bacterias”, explica Ángeles. La revista tiene cinco ejes: Quiero conocer, “porque el conocimiento empodera”; Quiero preguntar, “porque solo generando incertidumbre  podemos replantear lo que aceptamos como correcto”; Quiero jugar, porque cuando jugamos la incertidumbre no nos asusta; Quiero hacer, “porque hacer ayuda a construirnos” y Quiero decir, “porque al levantar la voz también nos sumamos a las de muchas otras”. 

¿Cómo ven a las niñas de entre 6 y 12 años, a quienes se dirige la revista? “Las vemos invencibles”, dice Ángeles. “Vemos que son niñas que se construyen a diario a través de los cuestionamientos. Son niñas que están creciendo en un mundo en movimiento. Niñas que hablan del aborto, que se replantean cuestiones de género, niñas que participan en marchas, niñas que tienen voz. Niñas que respetan la diversidad. Vemos que son intrépidas aunque algunos días, como nos pasa a nosotras, tienen miedo, y por eso debemos acompañarlas para que no se sientan solas cuando no se sientan tan fuertes. Son niñas que cada día toman decisiones, niñas que van construyendo su confianza. Y la van construyendo mientras nosotras también construimos la nuestra. Esta nueva convivencia sorora que se da en los distintos ámbitos sociales permite que podamos abrirnos junto con ellas. Pero también son niñas que se ven bombardeadas de información que las hace dejar de ser libres, y esa es un poco nuestra batalla. Solo podemos hablar de libertad si tienen las opciones, porque cuando no hay opciones, no es posible elegir”. Por eso, Intrépidas es una revista enfocada en la educación y en el empoderamiento de las niñas, que busca potenciar la equidad de género, que se aleja de los discursos heteronormativos que portan la mayoría de las publicaciones para niñxs, que quiere que crean que cualquier cosa que se propongan es posible y que da cuenta, por ejemplo, de mujeres con profesiones diversas que sean inspiradoras. “Nos gusta la imagen de una princesa que juega con pastillas efervescentes que hacen explotar volcanes. No está mal que a una niña le guste pintarse las uñas y hacerse lindos peinados o cocinar, pero cuando esto ocurre porque se baja una línea donde se estimula a gustarle a los demás a través de la estética como la única herramienta –o la más importante– que puede tener una niña, nos preguntamos: ¿Qué pasa cuando una niña no se siente identificada con ese modelo?” 

En el equipo de Intrépidas todas coinciden en que las niñas que conocen aprenden a quererse, confían en ellas mismas y se empoderan, y mientras más fuertes se sienten más colaborativas y sororas se vuelven.