Tras los cierres de escuelas, los docentes bonaerenses resisten el ajuste de la gobernadora María Eugenia Vidal sobre los Equipos de Orientación Escolar. Se trata de gabinetes que, formados por trabajadores sociales, psicopedagogos, psicólogos y fonoaudiólogos se encargan de dar apoyo a los niños y adolescentes con dificultades, para mejorar su inclusión: detectan problemas de aprendizaje, hacen de nexo con Educación Especial cuando los alumnos necesitan un docente integrador, hacen seguimientos cuando un chico falta de modo reiterado, trabajan con las familias si hay otras variables que inciden en que no pueda aprender. “Con la reforma que quieren imponer, los Equipos de Orientación dejarían de ser de cada escuela para convertirse en distritales. Esto sería una enorme pérdida, no es lo mismo que te manden a una escuela como un bombero que estar ahí de manera permanente, haciendo un trabajo territorial, acompañando la trayectoria de los chicos, vinculándote con las familias”, dijo a PáginaI12 María Laura Vázquez, psicopedagoga de una escuela pública de Lavallol. En su colegio están viendo muchos casos en que, al perder el trabajo los padres, los alumnos quedan sin los tratamientos a los que accedían por obra social. Contó que estas vacaciones de invierno, “por primera vez en mucho tiempo la escuela va a estar abierta para que los chicos puedan seguir yendo al comedor”.