Desde Santa Fe

Voces de alerta y repudio se escucharon ayer en la Legislatura por una incursión de Gendarmería en la planta industrial de La Virginia, en Rosario, donde impidió una asamblea de trabajadores, allanó la comisión interna, detuvo a una delegada de base, Carmen Peloso, durante tres horas y secuestró un megáfono como si fuera "un instrumento ilegal" y volantes. La Cámara de Diputados declaró su "preocupación" por el hecho en una minuta que se votó sobre tablas, el autor del proyecto Carlos del Frade advirtió que Gendarmería actuó como una "fuerza pretoriana" al servicio de los patrones, el "control social" y el "trabajo sucio". Mientras que el diputado Héctor Cavallero dijo que el operativo fue mucho "más bárbaro" que el que describió su colega, plantó la sospecha de que se realizó sin "orden judicial", por lo que le pidió al gobierno provincial que investigue si "fue autorizado por algún juez" y alertó: "Estas cosas se vacunan ahora o se van a desarrollar como epidemia si crecen los conflictos sociales".

Del Frade reveló que Gendarmería incursionó en la planta de La Virginia el miércoles pasado para impedir una asamblea de trabajadores y lo logró. "Es una de las industrias alimenticias más importantes del país, figura entre las 800 empresas que más facturan en la Argentina, tiene alrededor de 1.000 empleados, 200 de los cuales son temporarios y otros eventuales que ganan 8.500 pesos la quincena", dijo el legislador. "Es indispensable una acción del Estado para proteger a los obreros", agregó.

"El miércoles, a 48 horas del paro del 25 de junio, Gendarmería fue convocada al interior de la fábrica por el jefe de Personal para evitar una asamblea de trabajadores. La presencia de la fuerza fue tan intimidante que la asamblea no se hizo". Pero después allanó la comisión interna, "detuvo a una delegada de base, Carmen Peloso, con 21 años de antigüedad" y "secuestró un megáfono como si se tratara de un instrumento ilegal que afecta la seguridad de la provincia", ironizó el legislador.

La Gendarmería fue convocada por la empresa para "controlar una asamblea de los trabajadores", atropelló "todos los derechos laborales" y se convirtió "en una fuerza pretoriana" al servicio de "las patronales", el "control social" y el "trabajo sucio".

El diputado Cavallero coincidió con Del Frade, pero agregó que el operativo de Gendarmería puertas adentro de la fábrica fue "más bárbaro" que el que relató su colega. "Porque no sólo allanó la oficina del cuerpo de delegados y procedió a la detención de una delegada, sino que además del megáfono, también secuestró material de la comisión interna y volantes".

Cavallero se preguntó "si la intromisión de Gendarmería en La Virginia fue autorizada por algún juez. Me llamaría la atención que algún juez la hubiera autorizado. Yo no lo creo", dijo. Y solicitó al gobierno que investigue "si hubo una orden judicial para hacer este procedimiento" porque si eso no ocurrió "sería importante que la provincia lo aclare", sostuvo Cavallero y advirtió: "Estas cosas se vacunan ahora o se van a desarrollar como epidemia si crecen los conflictos sociales".