El pase de Roger Federer a la marca japonesa Uniqlo motivó una campaña por parte de la organización Public Eye para que el suizo se involucre en la situación de los trabajadores de su nuevo patrocinador. La entidad insta a los seguidores del número dos del ranking ATP a que le escriban al tenista para que exija a Uniqlo la mejora de las condiciones laborales en su fábrica de Indonesia. En 2017, la organización Clean Clothes Campaign, que promueve mejores condiciones en la industria textil, llevó a cabo una protesta contra Uniqlo por el mismo motivo. Además, el miércoles, el diario suizo Blick, publicó un duro artículo titulado “Las costureras sangran por el rey Roger”.