Un plan social hoy permite comprar la mitad de los alimentos que su equivalente a finales de 2015. Así lo reveló un análisis del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) sobre la pérdida de valor de compra de los planes sociales aplicado a alimentos de primera necesidad. El centro de estudios armó una canasta básica de alimentos populares (harina, polenta, carne picada, pollo, aceite, leche, huevos, frutas, verduras). El precio de esa canasta, de diciembre de 2015 a hoy, se incrementó en un 35 por ciento, mientras que el monto de la ayuda social solamente un 22 por ciento. Al final del gobierno anterior, un plan equivalía a 7,27 canastas de alimentos esenciales. Los ingresos que aporta actualmente esta ayuda permiten comprar sólo 4,77 canastas básicas. Los valores actuales son aún más bajos que los registrados cuando estalló la crisis de 2001.