El párroco de Resistencia, Chaco, Rafael Del Blanco aseguró que todos los católicos que "directo o indirectamente" participen de la aprobación de la ley de legalización del aborto quedarán automáticamente excomulgados de la Iglesia Católica por "la acción misma de ser conscientes de un pecado grave" e incluyó en la lista al presidente Mauricio Macri, en caso de que firme la promulgación de la normativa si fuera aprobada en el Senado. Del Blanco se respaldó para esparcir las presiones y amenazas sobre los legisladores creyentes en el derecho canónico, que, según señaló, contempla la figura "latae sententiae" que se refiere a quienes tienen una "sentencia ya impuesta".

Del Blanco ratificó así los dichos que realizó en una misa reciente en Resistencia, en la que apuntó contra la diputada chaqueña por Cambiemos Aída Ayala, no por la investigación respecto del lavado de activos durante su gestión como intendenta sino por haber respaldado la legalización del aborto. "No permitamos confundir que hay un sacerdote que la excomulgó. En el momento en el que ella levantó la manito lo hizo", les advirtió el párroco a los fieles presentes. 

El cura, en diálogo con Radio Con Vos, ratificó la postura persecutoria que mantiene un sector de la Iglesia respecto de las decisiones que tomaron los diputados en la sesión del 14 de junio y las que puedan tomar los senadores el próximo 8 de agosto. "El derecho canónico es muy explícito cuando se refiere al aborto como un delito de materia grave", apuntó el párroco. En ese sentido, aseguró que el propio presidente quedaría automáticamente ( "latae sententiae") excomulgado en caso de promulgar la ley, aunque reconoció que "podría irse a confesar y recibir la absolución de su pecado, de acuerdo al sacramento de la reconciliación". 

Frente a esa interpretación del derecho canónico, Del Blanco fue consultado por la excomulgación de los curas acusados de pedofilia o aquellos que fueron cómplices con la última dictadura cívico militar, en ese punto, el cura se refirió a los procesos de juicio canónico y volvió a reconocer que es suficiente la confesión para perdonar cualquier pecado. "Es la realidad, pero tengo que hacerlo con el firme propósito de no pecar más".    

Del Blanco también aseguró que "opina la mismo que la Iglesia" respecto del uso de métodos anticonceptivos y esbozó que hay "detrás todo un sistema económico", que "trae problemas de esterilidad" y que  "es un bloqueo a una cuestión natural".