La renuncia, ayer por la tarde, de Marta Pascal como coordinadora del Partit Demòcrata Català (PDeCAT) ha dejado la puerta abierta para que el expresidente Carles Puigdemont se haga con el control del partido hegemónico del independentismo. Pascal dio un paso atrás con los agradecimientos de rigor a sus (foto) compañeros y dejando claro que se iba porque no tenía la confianza del expresidente. El cambio en la dirección implicará llevar al partido a la línea dura en defensa de la república catalana, abandonando la vía más posibilista, analizó ayer el diario El País de España. Con la decisión, tanto Pascal como el sector crítico evitan exhibir la división públicamente en la votación de la nueva cúpula programada para hoy y que preocupaba especialmente a los alcaldes, un año antes de las elecciones municipales, dice el diario español. EL PDeCAT tiene más de 400 alcaldías en Cataluña.

La renuncia de Pascal llega un día después de que la Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein levantara las medidas cautelares que había impuesto al expresidente catalán Carles Puigdemont hasta su extradición, tras la decisión de la Justicia española de retirar la euroorden en su contra. “Puigdemont es libre y puede abandonar Alemania inmediatamente”, dijo la portavoz de la Audiencia , Frauke Holmer. El tribunal indicó en un breve comunicado que había recibido una notificación de la Fiscalía de Schleswig-Holstein en el que se le informaba sobre el paso dado por el Tribunal Supremo español, informó el diario La Vanguardia de Barcelona.